Dispositivos GPRS permitirán localizar a mayores afectados de demencias leves
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La Xunta ultima un proyecto piloto para entregar esos aparatos a 283 personas Activarán un sistema de busca por satélite si los ancianos se pierden o se desorientan
13 jun 2004 . Actualizado a las 07:00 h.Miles de gallegos de la tercera edad padecen demencias de grado leve que les hacen difícil la vida cotidiana tanto a ellos como a sus familiares. Pensando en este colectivo, la Consellería de Asuntos Sociais ha promovido la creación de dispositivos de localización basados en la tecnología GPRS, que permitirán conocer en todo momento el paradero de los ancianos que padecen este tipo de dolencias. El funcionamiento es muy sencillo: el paciente deberá llevar siempre consigo un terminal del tamaño de un teléfono móvil, que se fijará al cuerpo con arneses para evitar que se caiga o que el usuario lo retire. En caso de que el portador se sienta desorientado o necesite ayuda o asistencia de cualquier tipo, basta con apretar un botón para que se active un sistema de alerta que será inmediatamente percibido por la central de llamadas. Lo más interesante de esta aplicación, desarrollada por las empresas Level Telecom y Arteixo Telecom, es que la información que proporciona a la central de llamadas está personalizada para cada usuario; de esta forma, el mensaje indicará si el anciano que ha solicitado ayuda está en su casa, en un parque por el que suele pasear o en uno de los cafés que frecuenta, lo que garantiza una respuesta más ágil. Mayor autonomía En una primera fase, este dispositivo de localización será ofrecido a 283 personas en toda Galicia, aunque se espera que en un futuro la cifra pueda ampliarse. La principal ventaja que aporta este ingenio es que incrementa de forma notable la autonomía de las personas que sufren demencias leves, como el alzhéimer en sus fases iniciales. Además, también mejora la calidad de vida de los familiares, ya que se evita la necesidad de tener que acompañar a los enfermos en todos sus desplazamientos. Así lo aseguró la conselleira de Asuntos Sociais, María José Cimadevila, en el acto de presentación de estos dispositivos, cuando aseguró que el objetivo es «dar mayor tiempo de autonomía a los mayores y evitar preocupaciones a sus cuidadores». El coste del servicio es de 410 euros anuales por unidad, aunque la Consellería financia el 80%, de modo que cada usuario sólo tendrá que pagar un total de 102 euros al año.