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Casi 900 millones de kilos de pescado entrarán en la UE libres de impuestos

S. S. / E. A. REDACCIÓN / LA VOZ

PESCA Y MARISQUEO

Descarga de calamar patagónico en Marín (foto de archivo)
Descarga de calamar patagónico en Marín (foto de archivo) RAMON LEIRO

Satisfacción del congelado con el calamar, la conserva querría más atún y no prosperan las demandas de la pesca

28 nov 2023 . Actualizado a las 04:46 h.

Que nunca llueve a gusto de todos queda claro con las importaciones de productos del mar libres de impuestos aduaneros, los contingentes arancelarios, que acaba de aprobar el Consejo Europeo. Casi 900 millones de kilos de una treintena de pescados y mariscos de países ajenos a la UE podrán entrar en el mercado comunitario en los tres próximos años, no en dos, como inicialmente planteaba la Comisión, lo que aplauden las industrias transformadoras, porque contribuirán a que puedan mantener su capacidad operativa. Satisface a las congeladoras con el calamar, el gambón o el langostino, y en parte a las conserveras, que querían más atún. Sin embargo, los pescadores no han logrado los recortes que pedían en los túnidos, el abadejo de Alaska y la merluza del Pacífico y Argentina.

«Hemos salvaguardado la competitividad de nuestra industria y el suministro a los consumidores europeos de productos transformados de calidad a precios razonables, teniendo en cuenta al mismo tiempo los intereses del sector pesquero», sostiene Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación y presidente del Consejo Europeo.

«Estamos muy satisfechos con el trabajo realizado y el resultado obtenido para la industria», declara Eloy García, presidente de Conxemar, la asociación de importadores, exportadores y transformadores. Por ejemplo, con el calamar patagónico, que mantiene los 75 millones de kilos, si bien introduce una modificación «que dará más facilidades a la industria», además de permitirle «retomar la producción, parcialmente afectada» tras el brexit.

Gambón, atún, anchoa...

A 16 millones de kilos sube el contingente de gambón argentino, pero los procesadores no lo consideran «suficiente» y esperan alcanzar a los 48 millones del langostino vannamei. Importar esos productos sin tasas aduaneras también beneficia a los 16 barcos con base en Vigo y Marín que los capturan en las Malvinas. Conxemar «aplaude» la continuidad en otras especies de interés para el congelado.

«Ha faltado ambición en el gambón o el bacalao salado, siendo especialmente relevante en los lomos de atún», lamenta Roberto Alonso, secretario general de Anfaco-Cecopesca, la patronal conservera. «Los primeros países en la conserva europea pedían incrementar» los 35 millones de kilos de túnidos libres de impuestos porque la demanda es tan elevada que se agotan en cuatro días. Sin embargo, «se perpetúa el inmovilismo negativo de la Comisión, no sabemos por qué intereses», reprocha Alonso, con lo cual se «lastra la competitividad y el empleo» en el sector.

Desde Anfaco reconocen el incremento del gambón argentino y las nuevas posibilidades de procesado del calamar patagónico, aunque querrían más que los 2 millones de kilos de bacalao salado, al que se suman otros 155.00 de fresco, refrigerado o congelado, y más que los 1,5 millones de kilos de anchoa salada.

Abadejo y merluza

Las patronales de la pesca Europêche y Eapo no han visto atendidas sus demandas. No han conseguido convencer a la Comisión de que permitir 35 millones de kilos de lomos de atún «de bajos estándares y bajo valor crea una distorsión de precios, impidiendo que la flota de la UE pueda vender sus productos a un precio justo».

Seguirán entrando 340 millones de kilos de abadejo de Alaska, pese a que en su opinión pueden proceder, «a través de una puerta trasera», de Rusia, que igual que Bielorrusia tiene vetada la exención de tasas aduaneras en la UE. Tampoco prosperó su aviso de reducir los 110 millones de merluza del Pacífico y Argentina, porque «beneficia principalmente a China».