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Los Verdes piden que se prohíba la pesca con cebo vivo por cruel y peligrosa

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ

PESCA Y MARISQUEO

MARIA ISABEL LORENZO

El comisario de Pesca responde que no está en los planes de la Comisión, dado que se practica con especies en equilibrio y hay normativa que regula el bienestar animal en la acuicultura

15 ene 2023 . Actualizado a las 04:46 h.

Aferrándose a una consulta sobre el futuro de Europa en el que hubo aportaciones reclamando la prohibición de la pesca con cebo vivo, eurodiputados de los Verdes y algún socialista se han dirigido a la Comisión Europea interesándose por sus planes para vetar una «práctica cruel» que consiste en utilizar peces vivos y aprovechar que el grande se come el chico. La brutalidad viene dada porque muchos de esos ejemplares utilizados son de cría y «soportan niveles inaceptables de sufrimiento». Además, creen que eso entraña riesgos para el equilibrio medioambiental, dicen, porque pueden «propagar enfermedades y especies invasoras».

Tal es así que, según exponen en su pregunta, países como Alemania, algunas regiones de Austria, Escocia, Suiza e Irlanda —esta solo en agua dulce— han prohibido esta técnica y en Francia ciudades como París, Saint-Étienne y Grenoble han pedido su veto. Por eso preguntan por la posibilidad de erradicar ese sistema de pesca en la Unión Europea o si se puede impedir la venta de esos peces para pescar con cebo vivo.

La respuesta del comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius, ha supuesto todo un jarro de agua fría, puesto que señala que «la Comisión no tiene previsto prohibir el uso de animales de granja para la pesca con cebo vivo» y mucho menos prohibir esa práctica.

El Ejecutivo comunitario apunta que los eurodiputados de los Verdes deben referirse a la anchoa que se usa en el golfo de Vizcaya para pescar atún y al lanzón que se emplea para la lubina. Y tanto una especie como la otra están gestionadas de forma sostenible en el marco de la política pesquera común, a tenor de los dictámenes científicos, apunta.

Sinkevicius refiere también que la legislación actual sobre bienestar animal establece disposiciones generales para proteger a los animales en las piscifactorías y también exige a los Estados que garanticen que se toman todas las medidas adecuadas para evitar efectos adversos para la biodiversidad derivados de la dispersión de estas especies.