Nunca se pescó en Galicia tanta cantidad de ese cefalópodo parecido al calamar
19 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Parece acabarse paulatinamente, de un modo muy diferente al inesperado y repentino con el que apareció. A mediados de septiembre comenzó a caer en las redes en cantidades llamativas y en octubre se disparó, sorprendiendo a los marineros porque en Galicia nunca habían capturado tanta en tan poco tiempo. «Menos mal que a pescamos, porque no mar é como unha praga que arrasa con todo», comentan ahora que da la impresión de que comienza a decir adiós la pota voladora que mantuvo el listón alto en noviembre y lo ha rebajado en lo que va de mes. El maná de ese molusco cefalópodo semejante al calamar está siendo todo un revulsivo económico para los arrastreros de litoral en el tercer trimestre del 2022.
Solo en 40 días intensos de octubre y noviembre descargaron más de 7 millones de kilos por los que les pagaron casi 9 millones de euros. A un ritmo más pausado, los desembarcos continúan y en lo que va de año ya rondan los 10 millones de kilos y los 14 de euros.
¿Por el cambio climático?
Tratando de buscar explicaciones, los marineros atribuyen al cambio climático que ha elevado la temperatura del mar la inusitada presencia de tanto Illex illecebrosus en el litoral gallego. Por mucho que en ciertas elaboraciones pueda venderse como Loligo vulgaris, el genuino calamar, no son iguales. Comparten cualidades nutricionales, pero no textura ni sabor. Enteros, tampoco forma, pues las aletas de la pota cubren un tercio de su cuerpo y las del calamar rondan la mitad. Y otra diferencia, el precio, pues el calamar multiplica por diez al de la pota en las lonjas gallegas.
Antes de tasas e impuestos, a los pescadores les pagaron este año una media de 1,41 euros por cada kilo de Illex illecebrosus. Con los 9,8 millones de kilos descargados desde enero hasta esta semana, ingresaron algo más de 13,8 millones de euros, según los datos enviados por las lonjas a la plataforma PescadeGalicia, de la Consellería do Mar. No constan precedentes de un año con tanta pota. El triple que en todo el 2021, pero multiplica por más de diez la media del período 2014-2020.
A Coruña lidera el mercado
A Coruña se ha erigido este año en el gran mercado de la pota voladora fresca en el noroeste español. Por su rula pasaron unos 5,6 millones de kilos, seis de cada diez comercializados en la comunidad autónoma. Y gran parte comenzaron a descargarse a finales de septiembre y se dispararon en octubre y noviembre. En unos 40 días se facturaron 4,9 de los 6,8 millones de euros acumulados en lo que va del 2022. De momento casi cuadriplican los kilos y los ingresos de todo el 2021 con ese molusco. Nada que ver los desembarcos de este mes con los abarrotes de varias subastas de octubre, cuando superaron los 200.000 kilos diarios.
Ribeira, Vigo, Burela...
Abundó tanto que las descargas se repartieron este año entre varios puertos. Ribeira ronda los 2 millones de kilos y los 3 de euros, el doble del ejercicio anterior. Al balance de el 2021 se aproxima Vigo, con 0,7 millones de kilos y 1,6 de euros. Por más de tres multiplica Burela las ventas, con 0,5 millones de kilos y 0,5 de euros. Y las quintuplica Marín, con casi 0,4 millones de kilos y 0,6 de euros.
Se han disparado en Muros, hasta 0,3 millones de kilos, 47 veces más que el año pasado, y casi 0,4 de euros. De cero kilos a 0,1 millones pasó Camariñas, donde facturaron 0,1 millones.