Irlanda apresa a otro pesquero gallego, el segundo en una semana

Alrededor de las seis de la tarde de este viernes atracaba en el puerto de Castletownbere el palangrero Valle Fraga, de bandera española, con base en Burela y uno de los veteranos en los caladeros comunitarios de Gran Sol. Esta vez no iba a descargar sus capturas ni a aprovisionarse, como hacen muchos de los barcos españoles que faenan en esa zona. Acataba la orden de la Armada de Irlanda, que lo había apresado horas antes, en alta mar, dentro de las 200 millas de la zona económica exclusiva de ese país. Según los militares del Irish Naval Service, «la detención estuvo relacionada con presuntas infracciones de las normas de pesca». A la espera de conocer qué cargos le imputan, fuentes vinculadas con la empresa armadora explican que fue arrestado después de rompérsele un peldaño de la escalera cuando subía a bordo un inspector para comprobar si tenía todo en regla.

Es el segundo pesquero de capital gallego apresado por Irlanda en la última semana, y el tercero en los últimos tres meses. Igual que en los dos casos anteriores, los militares de ese Estado de la Unión Europea (UE) reciben en sus redes sociales aplausos de internautas que arremeten contra la flota española, de bandera o de capital. Reaccionan a lo que cuenta el Irish Naval Service. Sin citarlo por su nombre, señala que el Valle Fraga, «registrado en España, es el séptimo buque detenido» por ellos en lo que va de año. Con quince tripulantes a bordo, este palangrero de fondo zarpó de Burela el día 23, comenzaba la marea y solo había hecho un lance en los caladeros comunitarios, pero «en la zona económica exclusiva de Irlanda», precisa el Irish Naval.

Punta Vixía y Punta Candieira

También ha sido arrestado por el patrullero William Butler Yeats, el mismo que el pasado sábado, día 21, detuvo al Punta Vixía, un arrastrero de fondo con bandera de Francia pero propiedad de armadores de Vigo, donde opera habitualmente. «Por presuntas infracciones de las normas de pesca», fue a por él de madrugada, cuando navegaba a unas 110 millas al sur de Mizen Head, la costa suroeste irlandesa. También lo retuvo en Castletownbere, de donde zarpó el martes 24, después de abonar 105.000 euros de fianza. Según Rosa Quintana, conselleira de Mar en Galicia, al Punta Vixía lo acusan de un presunto delito de pesca ilegal dentro de sus aguas territoriales, doce millas.

Es lo mismo que le imputa el Gobierno de Dublín al Punta Candieira, un palangrero de fondo de bandera española que opera en el puerto de Celeiro (Viveiro). A ese barco gallego lo liberó después de permanecer catorce días retenido y de cobrarle una fianza de 170.000 euros.

Los cargos contra el Valle Fraga se concretarán cuando su patrón citado por la Justicia irlandesa. Y en esa primera comparecencia se fijará el aval judicial que deberá depositar para ser liberado y poder volver a trabajar.

Desde hace meses, la flota española de Gran Sol detecta lo que califica de «exceso de celo» por parte de Irlanda, especialmente con barcos abanderados en otros países comunitarios.

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