Patrocinado porPatrocinado por

Los científicos plantean subir un 20 % la caballa y recortar un 42 % el jurel

E. abuín REDACCIÓN / LA VOZ

PESCA Y MARISQUEO

MARCOS CREO

La flota, encolerizada por el cambio de cálculo de la xarda por las protestas de Noruega

20 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Las recomendaciones del ICES (Consejo Internacional para la Exploración del Mar) han tenido de nuevo el poder de encolerizar a buena parte del sector pesquero gallego. Y eso a pesar de que el consejo trae incorporada una subida del TAC (total admisible de capturas) de xarda para el año que viene. Un aumento del orden del 20 %, algo que no recuerdan desde hace tiempo los pescadores. Pero esa propuesta de incremento no es suficiente para aplacar el malestar por la sugerencia de recortar un 42 % el jurel del oeste (que incluye el Cantábrico Noroeste y el área de Gran Sol); un 20 % la merluza del sur; o un 26 % la de Gran Sol.

Y sobre todo indigna que ese aumento esté ligado al golpe en la mesa que dio Noruega que, al ver perdida la certificación MSC para la caballa que capturaba su flota, exigió al ICES una revisión de la evaluación. Y resultó que sí, que tal y como llevaban tiempo denunciando los pescadores gallegos, los cálculos estaban mal hechos. Tanto, que a mediados de temporada, la institución cambió su recomendación y de sugerir en octubre del 2018 una rebaja del 42 % (un TAC de 318.403 toneladas), que los ministros de Pesca de los 28 suavizaron en diciembre al 24 % (se dejó en 653.438 toneladas), pasó a proponer en mayo pasado un TAC de 770.358 toneladas, un 140 % más que en su primer planteamiento. Ahora, para el 2020, el cupo que sugiere es de 922 064 toneladas, un 20 % superior a la cantidad apuntada en mayo, pero un 40% por encima de la que aprobó la UE en diciembre.

¿Qué ha ocurrido para que un stock se haya recuperado tan de golpe? Desde luego no se trata del milagro de los panes y los peces. Ocurre «que se cambiou o método de cálculo e mesmo os datos que se teñen en conta para a avaliación; todo con tal de que o resultado dese como lle conviña a Noruega», sostiene Torcuato Teixeira, secretario xeral de Pescagalicia, más encendido si cabe porque esa revisión no se aplica a la cigala, para la que los científicos reclaman otros tres años de veda, que se sumarían a los tres cuya captura lleva ya prohibida en el Cantábrico Noroeste.

No solo el arrastre está de uñas, también hay malestar en el palangre y el cerco Así es que un consejo que debería ser celebrado por la flota, pues plantea un incremento sustancial de las capturas, se convierte en una afrenta al sector gallego, máxime cuando Noruega sí ha visto su cuota revisada al alza ya este mismo año, aseguran, y en el caso de la UE ni siquiera se ha valorado la posibilidad de usar esas toneladas que se subieron del consejo inicial para descontarlas de la multa que están pagando por la sobrepesca de hace diez años. Y lo peor, apunta Juan Carlos Corrás, gerente de Pescagalicia y presidente de Lonja de La Coruña, que «según el informe del ICES, ya se prevé que las capturas estén por encima del TAC fijado: «¿No hay multa para ellos?», inquiere.

No solo el arrastre está de uñas. También el palangre, porque se propone rebajar el TAC para la merluza sur. Y el cerco, al que no hacen más que marear con las subidas y recortes del jurel. Si el año pasado la recomendación era subir el de la VIIIc y bajar el de la IXa, este año es al revés. La propuesta es de aumentar un 24 % al sur de Fisterra y bajarlo al norte de esa línea ni más ni menos que un 42 %.

 

La merluza que se pesca ahora en Gran Sol está más delgada que en el 2010

Se acabó la buena racha de la merluza de Gran Sol. A tenor de la evaluación del ICES, la biomasa de la especie tocó techo en el 2016, año en el que se obtuvieron los datos más altos de la serie. Pero ahora van dos ejercicios consecutivos en que han caído las capturas y el número de individuos del stock. Además, los científicos han observado una disminución de los ejemplares. Según dicen, las merluzas que ahora se capturan están más delgadas que las del 2010. Si hace 9 años el peso medio estaba en 3,04 kilos, el año pasado era de 2,91. Así, aunque la mortalidad por pesca está por debajo de los puntos de referencia y los indicadores biológicos también apuntan a que los niveles de biomasa están por encima de los límites de precaución, recomienda bajar el TAC casi un 26 %. Esto es, que no se capturen más de 104.763 toneladas, frente a las 141.160 que se han autorizado para este año (39.548 para la flota española).

 Peor es el caso de la merluza ibérica. La biomasa del stock está por encima de los niveles de biomasa de precaución e, incluso, por encima del rendimiento máximo sostenible (RMS), pero como el esfuerzo pesquero es mayor del recomendado para mantener ese RMS, la sugerencia de los científicos es recortar el TAC un 20 % y no sin superar las 6.615 toneladas. Ni que decir tiene que la flota ha estallado en cólera, en especial el arrastre que cree que no se está teniendo en cuenta la importante reducción de este segmento de flota que ha habido en los últimos años.

El rape abunda en aguas occidentales y está estable en las ibéricas

Los stocks de rape en Gran Sol están bien robustos. Según el ICES, las capturas y la biomasa se encuentran cerca de los valores más altos de la serie. Además, la mortalidad pesquera en los últimos años está en niveles de RMS y el stock «en un nivel muy alto de abundancia». Y aún así, el consejo es un TAC de 31.042 toneladas, cuando el que se acordó para este año fue de 41.370. Para el rape de aguas ibéricas se propone un recorte del 1 %. Para el gallo, una subida del 15 %, que alcanza el 24 % para la meiga.