La geografía de las plazas gallegas: el marisco arousano llega hasta Mallorca esta Navidad
CONSUMO MAR
Para las peixeiras, diciembre es temporada alta: además del trabajo habitual, atienden encargos a distancia en los que triunfan el centollo y el camarón
21 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Hace años que la fama de las peixeiras arousanas ha traspasado la frontera de O Padornelo; que muchas familias de toda la península compran a distancia mariscos de la ría con los que agasajar a sus seres queridos durante las fiestas navideñas. Lo hacen depositando una confianza ciega en quienes atienden los puestos de nuestras plazas de abastos, a quienes conocen durante sus vacaciones o, simplemente, por el infalible método del boca a boca. Este año, las ventas y los envíos han sido irregulares, han avanzado a trompicones. Los momentos de más pedidos se han adelantado sobre el calendario habitual, porque «a xente tiña medo da folga de transporte» y muchos anticiparon sus peticiones a las peixeiras gallegas. Otros prefirieron esperar, y este fin de semana sonaron los teléfonos de muchas de ellas, que tomaron buena nota de los encargos.
«Este ano enviamos produto para toda España, mesmo para Mallorca», comenta Eva, el alma de Evamar. Ella tiene un puesto en la plaza de O Grove y otro en Cambados. Y este año ha abierto también una página web, achalana.com, a través de la que sigue abriendo mercados para los productos que adquiere en las lonjas de las rías gallegas. «Vainos moi ben. A web funciona, pero temos moitos pedidos de clientes de toda a vida, xente de moitos anos, e tamén de xente que nos coñece a través deles», explica esta veterana de los envíos de marisco.
En esa categoría de experta figura también la grovense Blanca Cao, que este año ha detectado una mayor reserva a la hora de hacer pedidos. «A xente estaba preocupada polo tema da folga do transporte, por se había problemas», comenta. Una vez desconvocada esa protesta, las ventas parecen haber retomado su ritmo.
Los productos que más se demandan para este tipo de envíos son los que siempre triunfan en estas fechas: centollo, camarón, nécora, buey de mar, percebe... «También hay gente que pide almeja. Pero en esos casos suelen ser clientes que llevan toda la vida con nosotros», explica María Sabarís, que atiende un surtido puesto de pescados y mariscos en la plaza de abastos de Vilagarcía. Ella también «va teniendo» pedidos de marisco llegados de todos los rincones de España: desde Burgos a Barcelona, desde Madrid a Zaragoza. Al igual que Blanca Cao, Sabarís no ha abierto un espacio propio en Internet, pero dispone del escaparate que es la página conjunta de la plaza de abastos, donde es fácil encontrar el teléfono de todas las vendedoras de todo tipo de productos.
Aunque, en su caso, parece que lo que mejor funciona es el contacto directo, los clientes que nacen durante los períodos vacacionales o de descanso. «Hubo gente que vino a pasar el puente de la Constitución, que nos conoció aquí y que se llevaron el contacto para hacer pedidos ahora en Navidad». Por lo que se ve, han cumplido la promesa, y algunos ya han cursado pedidos para alimentar con el mejor marisco sus mesas de fiesta.