Empieza la temporada alta de la sardina, que ayer llegó al mercado de Carballo a 6 euros el kilo. Buenos ejemplares, ya con mucha grasa, procedentes de tarrafas de Malpica, listas ya para la brasa. Entre el San Antonio y el San Xoán arranca la mejor época de este pescado azul, que hasta ahora se ha consumido mucho abierto y frito en los hogares de la Costa da Morte y que va en busca de la parrilla. Sin embargo, ayer fueron los pescados planos los que mandaron en la oferta de las pescaderías de la plaza carballesa. Como complemento, los bivalvos de la ría de Muros y Noia.
planos
De ración y para compartir. A 35 euros cotizaban ayer los resbaladizos lenguados recién pescados por barcos con base en el puerto de Malpica. De ración más bien generosa, fueron muchos para restaurantes. Se acompañaron por rodaballos para compartir, igual de frescos, y al mismo precio.
En Caldeirada
Pinto y abadejo. Los pescados que mejor se llevan con la caldeirada no cotizaban ayer a la baja en el mercado carballés. El pinto y el abadejo, grandes y carnudos, ideales para la preparación en salsa, había que pagarlos a 18 euros el kilo.
Bivalvos
Del Barbanza. Casi a precio de Navidad estaban las almejas, a 38 euros, de la ría de Muros-Noia. De muy buen tamaño, encerraba cada una de ellas el sabor del Atlántico, al igual que los berberechos de la misma zona, que se vendían a 20 euros. Precios muy altos debidos a la escasez porque hay varias áreas marisqueras cerradas por marea roja.
En azul
Los pelágicos. A punto está de llegar el verano, la época más propicia para los pelágicos, los pescados a por los que van las tarrafas de la Costa da Morte. Son especímenes sabrosos, de una muy saludable grasa azul, tesoros que traen a tierra las tarrafas, por la mañana y de madrugada. En el mercado de Carballo había ayer sardinas y jureles, a 6 euros en ambos casos, además de las muy demandadas jurelas, ideales para el horno, a 10 euros, y parrochas del Mediterráneo, a 8.
Al horno
Pescados finos. Fueron los que más sufrieron por el cierre de la hostelería porque son los más demandados para los restaurantes y llegaron a estar muy baratos, pero han recuperado su precio habitual. Los que traen los barcos del día, sobre todo los «finos» por el sabor suave de su carne. La lubina cotizaba ayer en la plaza de abastos de Carballo a 28 euros, y el pargo, ideal al horno, llegaba a los 30. La merluza, según tamaño, de 14 a 15 euros.