Es la mayor instalación de toda España, pero en agosto perdió toda la producción
01 feb 2023 . Actualizado a las 19:50 h.Los dos últimos annus horribilis del Grupo Tres Mares, que tenía en Lires (Cee) la mayor piscifactoría del España, han terminado nada más arrancar el 2023. Caviar Pirinea, una empresa con sede en Yesa (Navarra), ha comprado la instalación ceense y Truchas del Umia, de Moraña, que son de la misma propiedad. Lo ha hecho después de que el grupo gallego entrara en preconcurso de acreedores, según explicó este martes Lorenzo Maynard, director financiero de la compañía, líder nacional en la producción de trucha y esturión.
Tres Mares pasó de plantearse duplicar su plantilla y criar tres millones de kilos de truchas, en marzo del pasado año, a tener que plantear un ERTE en agosto a causa de la pérdida de toda la producción. La familia Arregui, anterior dueña, nunca aclaró si el problema que precipitó la caída, fue técnico o humano, pero los nuevos dueños han dejado claros los motivos. «En los próximos tres años realizaremos una fuerte inversión para intentar que la producción de trucha esté segura, que se cumplan las condiciones de caudales en verano y poder garantizar la sostenibilidad de la planta», dijo este martes Lorenzo Maynard.
Hasta mediados de este mes de febrero está en marcha el ERTE por causa de fuerza mayor. Los nuevos propietarios no garantizan todos los puestos de trabajo, pero sí han dicho que el nivel de empleo será muy importante y que su idea es que la piscifactoría siga siendo «motor económico y social de la zona». También señalaron que a partir de ahora harían «una producción diferente, con mayor valor añadido».
Caviar Pirinea obtiene con la compra de las instalaciones de Tres Mares un salto importante en la producción y con ella busca «atender toda la demanda». La idea es potenciar el mercado nacional y apoyar las exportaciones, sobre todo a Francia, de donde proceden los dueños de la compañía constituida hace ahora veinte años.
Tres Mares obtuvo una prórroga extraordinaria de Ministerio de Transición Ecológica para poder operar hasta el 15 de abril de 2056. Se le habían concedido 75 años más de vida en lugar de fijar el fin de la concesión en marzo del 2021. Fue el primero de los sobresaltos sufridos por la empresa en los últimos tiempos. A principios de marzo estaban celebrando el nuevo plazo y tenían grandes planes, pero la huelga del transporte hizo que tuvieran que prescindir de 30 eventuales. Antes de eso llegaron a dar trabajo a 86 personas. La pérdida de toda la producción en agosto dio la puntilla. Estaba previsto que se recuperaran en dos meses si se daban las condiciones necesarias, pero eso no ocurrió.
La mayor parte de la plantilla de la planta que era de Tres Mares está compuesta por mujeres del entorno y su mercado principal era el alemán.
La transmisión de la propiedad ya se ha realizado, por lo que Caviar Pirinea suma ya la planta de Lires y Truchas del Umia a las instalaciones de cría que tienen en Yesa (Navarra), Peramola (Lérida) y Oliván y El Grado (Huesca).