Charlina Vitcheva: «Retirar la exención fiscal permitirá a la pesca reducir su dependencia del gasoil»
ACUICULTURA
La directora general de Asuntos Marítimos y Pesca insiste en que las vedas a la pesca de fondo, que precisa que son 87 y no 94, irán adelante porque hay que conciliar los métodos de pesca con el entorno
18 jul 2022 . Actualizado a las 08:47 h.Habrá vedas a la pesca de fondo, que no serán 94 sino 87, es pronto para revisar la obligación de desembarque y lo mejor para ayudar al sector a desengancharse del combustible fósil que tanto quebradero de cabeza le está dando es retirar la exención fiscal que tiene. Aún así, Charlina Vitcheva asegura que firmaría el manifiesto en defensa de la pesca gallega porque comparte muchas de sus ideas. Desde luego no la de que se antepone el medio ambiente a la dimensión social, a tenor de las respuestas que dio a un cuestionario.
-¿Conoce el manifiesto en defensa del sector pesquero gallego de y su cadena? ¿Lo firmaría?
-Sí, conozco perfectamente el manifiesto y lo hablé con las autoridades gallegas y con representantes del sector. Son muchas las ideas expresadas en este Manifiesto que comparto. Estamos en la misma línea sobre la dimensión social de la política pesquera común (PPC), la importancia de apoyar la pesca artesanal y de invertir en la lucha contra el cambio climático, incluso impulsando la descarbonización de nuestras flotas. Hablé sobre los barcos del futuro, con menos emisiones de carbono y utilizando energías renovables con una empresa de construcción naval con sede en Vigo. También he visitado su Puerto y quedé impresionada con la vitalidad del sector y su potencial de innovación. Así que sí, suscribiría los principios que sustentan esta visión en el manifiesto.
-¿Tiene razón el sector pesquero al criticar que se antepongan las medidas biológicas a las medidas socioeconómicas? ¿No hay forma de equilibrar estos tres pilares de la sostenibilidad ahora que, según la FAO, el 82,5% del pescado desembarcado procede de stocks en buen estado?
-Me gustaría reconocer los tremendos esfuerzos realizados por el sector y las autoridades nacionales para alcanzar tal nivel de rendimiento máximo sostenible (RMS) en el Atlántico que nunca antes se había visto. En el 2020, más del 99 % del pescado del Atlántico nororiental que se desembarcó en la UE de poblaciones gestionadas por la UE procedía de fuentes sostenibles. De hecho, hemos recorrido un largo camino gracias a las herramientas eficientes implementadas a través de la política común de pesca. Esta se basa en tres pilares: el social, el económico y el medioambiental y van de la mano, ya que a medida que prosperan las poblaciones pesqueras, prospera el un sector pesquero próspero. Estamos siendo testigos de una fuerte correlación directa entre el buen rendimiento económico de las flotas que pescan poblaciones gestionadas de forma sostenible. Por el contrario, los stocks mal gestionados no sustentan a los pescadores que dependen de ellos. El equilibrio entre los tres pilares es nuestro trabajo diario y este equilibrio es frágil: si una población está enferma, entonces el sector tendría que pagar un precio demasiado alto si no se tomasen medidas de recuperación inmediatas para reconstruir el stock. Tenemos muchos ejemplos de ello, ya sea la merluza norte, de la que tenemos un 700 % más de biomasa, o ahora la merluza sur, que tras muchos años de esfuerzo, los científicos anuncian un aumento del 50 %. Los beneficios socioeconómicos del aumento de la biomasa irán directamente a los pescadores, está claro. En cuanto a los métodos de pesca, si analizamos el uso de artes de fondo en ecosistemas marinos vulnerables, necesitamos conciliar nuestros métodos de pesca con el entorno del que dependemos. Los ecosistemas marinos vulnerables (EMV) son el núcleo de la salud del océano; participan en la reconstrucción de los stocks y deben protegerse; esto debería ser entendido.
-Los sectores gallego y español reclaman reformas profundas de la política pesquera común. ¿Cree la Comisión que necesita muchos cambios? ¿Cuáles?
-La Comisión está preparando un informe sobre el funcionamiento de la PPC que se publicará a finales de año. El informe analizará todas las disposiciones del reglamento de la PPC e identificará cómo abordar cuestiones que no están lo suficientemente cubiertas en la actual política, como puede ser la adaptación al cambio climático, la dimensión social y la contaminación en el mar. Resaltará lo que funciona bien y lo que no tan bien.
Tras una extensa consulta con todas las partes interesadas, el informe identificará qué aspectos necesitan refuerzo y cómo se pueden usar las soluciones que ya recoge la normativa actual. Si queremos dar estabilidad al sector, a la forma en que gestionamos la pesca en Europa, creo que es demasiado pronto para introducir cambios legislativos. Este es, sin duda, el caso de disposiciones como la obligación de desembarque, cuya aplicación plena ha entrado en vigor muy recientemente. Aún así, no queremos adelantarnos al resultado del análisis.
-¿Concretará la Comisión Europea su intención de cerrar 94 zonas en cuatro países a la pesca de fondo, a pesar de la falta de apoyo de una mayoría cualificada en el Consejo y del abierto rechazo del sector pesquero, que se queja de sesgo en la evaluación del impacto de su equipo? ¿Puede adelantar el calendario que tiene previsto?
-Tenemos que aclarar los hechos: los cierres afectan a 87 zonas y no a 94, en las aguas de Atlántico nororiental de la Unión Europea. La votación de la propuesta de la Comisión no ha tenido lugar en el Consejo, sino en el Comité de Pesca y Acuicultura, donde está representado cada Estado miembro. Este es el procedimiento para la adopción de los llamados «actos de ejecución», que es el procedimiento para esta medida. La Comisión no está proponiendo nada nuevo, solo está implementando las disposiciones ya adoptadas en el 2016 en el reglamento de acceso a las especies de aguas profundas ((UE) 2016/2336). En otras palabras, está llevando a cabo la voluntad del legislador de la Unión: el Parlamento Europeo y el Consejo. Además, la Comisión basó su proyecto legislativo en el asesoramiento científico que se emitió en el 2021, complementado con un asesoramiento técnico a principios del 2022. El Ejecutivo comunitario tiene plena confianza en el trabajo realizado por los científicos del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES), organismo científico independiente del que forma parte España, como todos los miembros de la UE, que ha analizado minuciosamente los impactos de todos los artes de fondo y ha concluido que dichos artes no deberían entrar en contacto con el fondo marino en 87 zonas. La medida se toma para evitar un mayor impacto en los ecosistemas vulnerables, de los cuales depende nuestro océano para su salud y su futuro. Es importante entender que los científicos han trabajado con datos proporcionados por cada Estado miembro para determinar dónde se está pescando con artes de fondo y que lo han equilibrado con la protección de los ecosistemas marinos, para evitar al máximo perturbar las operaciones de pesca. Sin embargo, allí donde hay necesidad de cerrar una superficie vulnerable, debe cerrarse. En este contexto, la Comisión Europea está decidida a continuar con el proceso confirmado en junio y continuar trabajando con todas las partes interesadas para ayudarlos a implementar los cierres. Se espera un nuevo dictamen de ICES para finales de año y los cierres pueden ser reexaminados bajo esos nuevos resultados.
-¿Por qué la Comisión Europea indefectiblemente da más crédito a lo que dicen los científicos y no a la experiencia de los pescadores cuando, por ejemplo, este año los biólogos del ICES han admitido que han estado calculando el stock de merluza (tanto en aguas ibéricas como en Gran Sol ) sobre la base de un error: que había un 70 % menos de biomasa. ¿Harán las paces? ¿Se escuchará más a los pescadores?
-Debemos tener mucho cuidado de no socavar la credibilidad del proceso científico. Tenemos la obligación de gestionar nuestras pesquerías sobre la base del mejor asesoramiento científico disponible. Este es un principio fundamental de la buena gobernanza, no solo para la pesca, por cierto. La política pesquera común contiene disposiciones específicas al respecto. En la UE, contamos con mecanismos para asegurar el asesoramiento científico independiente de las organizaciones científicas más competentes -el ICES en el Atlántico Norte-, pero también el Comité Científico, Técnico y Económico de Pesca (STECF). La solvencia e integridad de estos organismos asesores están reconocidas internacionalmente y ambos prestan servicios excepcionales a los gestores pesqueros de la UE con total transparencia. Además, su trabajo se basa en los datos que aportan los Estados miembros, datos sobre la biología y los desembarques de especies pesqueras, pero también datos económicos. Estos datos pueden ser dependientes o independientes de la pesquería (obtenidos a través de encuestas). Sin embargo, la información de los pescadores también es importante, ya que tienen un conocimiento estrecho de los ecosistemas marinos al faenar en el mar. Cada vez reclaman con más insistencia la posibilidad de que sus observaciones y conocimientos se tengan en cuenta en el proceso científico, pero, a menos que esta información se recopile de manera científica y metódica, a menudo puede ser anecdótica y, por lo tanto, no brindar una representación fiel del estado de los recursos pesqueros. Este es uno de los retos a los que nos enfrentamos para seguir mejorando la calidad de las evaluaciones de los stocks, y pensamos que la transición digital puede ayudarnos a aprovechar el conocimiento y la información de los pescadores, pero también de los ciudadanos interesados en general. Sin embargo, también es importante tener en cuenta que el proveedor de asesoramiento científico independiente, el ICES, ya consulta a las partes interesadas para calibrar el asesoramiento antes de su publicación. Con respecto a la merluza norte y el ejemplo específico que se menciona, este año el ICES ha emitido un dictamen que permite establecer un total admisible de capturas (TAC) en el 2023 en un 50 % por encima del nivel de este año (el dictamen es un 70 % más alto que el anterior, pero solo un 50 % más alto que el TAC fijado por el Consejo). Esto no es el resultado de errores pasados, sino de una mejora en los métodos de evaluación del stock. En este caso, el estado de la población estimó anteriormente utilizando tendencias en métricas del stock, como la mortalidad total, el reclutamiento y la biomasa, y solo se disponía de un consejo de precaución. Sin embargo, este año, los científicos pudieron brindar un asesoramiento basado en el rendimiento máximo sostenible, después de una revisión que implicó una evaluación cuantitativa completa, en lugar de solo un análisis de tendencias. Esto ha sido posible gracias al apoyo continuo que la UE brinda al ICES para que este ofrezca el mejor asesoramiento científico disponible. El organismo también hizo hincapié en que esta mejora del estado del stock está relacionada con una mejora del reclutamiento (incorporación de ejemplares a la pesquería) en los últimos años. Por tanto, es importante continuar apoyando el trabajo de los científicos y trabajar por una mayor participación de las partes interesadas, lo que reforzará la confianza en el proceso científico. La experiencia reciente, también de otras áreas de la ciencia, por ejemplo en relación con la lucha contra el covid, es un buen recordatorio sobre el papel central de la ciencia para respaldar un proceso de toma de decisiones sólido y transparente.
-¿Las oenegés conservacionistas tienen más credibilidad que los grupos de la industria pesquera, como afirman esta última?
-La PPC otorga una gran importancia a dar voz a las partes interesadas en el foro adecuado. A través de la regionalización, grupos regionales, consultas públicas nacionales y, especialmente a nivel de la UE, a través de los consejos consultivos con su representación equilibrada de oenegés y grupos industriales. Los consejos consultivos desempeñan un papel muy importante, al proporcionar puntos de vista equilibrados, asesoramiento y recomendaciones a la Comisión, que han sido adoptados por la representación cuidadosamente compuesta de las partes interesadas. La consulta amplia de las partes es crucial para incluir los puntos de vista de todos, para facilitar la discusión y generar confianza antes de tomar cualquier decisión. Esto es lo que hemos estado haciendo para recopilar las opiniones de todas las partes sobre el funcionamiento de la PPC a lo largo de este año. Hemos tenido una amplia consulta al público, a los grupos regionales, a los consejos asesores y nuestro evento público de partes interesadas que tuvo lugar el 10 de junio para cerrar el proceso.
-¿Debe prohibirse la pesca de arrastre de fondo en aguas de la UE? ¿Cuándo se publicará el Plan de Acción de la Estrategia de Biodiversidad?
-Hay muchos factores en juego que deben ser considerados. La pesca de arrastre de fondo es un tipo de arte que tiene ciertos impactos ambientales en los fondos marinos. Otras también lo tienen, quizás no sobre el lecho marino pero sí en tortugas, delfines, aves marinas u otras especies. Los aparejos que contactan con el fondo no son los únicos que suscitan preocupación y la pesca de fondo representa alrededor del 25 % del empleo en la flota de la UE. No hay duda de que debemos garantizar un equilibrio entre los desafíos socioeconómicos y la protección del medio ambiente marino. Es necesario considerar cuidadosamente qué tipos de pesca deben permitirse en qué área atendiendo a las necesidades ambientales y socioeconómicas de esa área. Aquí es donde la ciencia y los datos son cruciales para tomar decisiones informadas. El Plan de Acción abordará cómo se puede conciliar el uso de artes de pesca de fondo con los objetivos establecidos en la estrategia de Biodiversidad. Se espera que el Plan de Acción se publique después de los meses de verano.
-¿No es un riesgo reducir la oferta de pescado de la UE al mercado cuando la UE depende en un 70% de las importaciones, sin la garantía de sostenibilidad que tienen las pesquerías europeas? ¿Cómo se puede garantizar la seguridad alimentaria?
-Garantizar la seguridad alimentaria es una de las máximas prioridades de la Comisión. Ante las últimas crisis -el covid primero y la agresión de Rusia a Ucrania, después-, la Comisión ha reaccionado rápidamente con medidas financieras rápidas -activó el mecanismo de crisis del Fondo Europeo Marítimo de Pesca (FEMP), el marco temporal de ayudas estatales y la propuesta de revisión del FEMP- para garantizar el suministro continuo de los mercados de la UE y apoyar a sus productores de la UE, teniendo en cuenta las especificidades de la cadena de suministro de pescado. La Comisión está siguiendo de cerca la situación de los mercados a través de su observatorio (EUMOFA), siguiendo la evolución de los factores que afectan a la seguridad alimentaria desde la perspectiva del suministro de productos de la pesca y la acuicultura. La crisis reciente y sus impactos en el mercado han puesto de relieve la necesidad urgente de mejorar la resiliencia a largo plazo de nuestro sistema alimentario para la próxima generación. La Comisión está firmemente comprometida con el Pacto Verde y la estrategia De la granja a la mesa y sus ambiciones. El plan de contingencia para garantizar el suministro de productos y la seguridad alimentaria en tiempos de crisis jugará un papel importante en este sentido, pues incluye varias herramientas para mitigar los impactos en el suministro de alimentos de la UE, como el Mecanismo Europeo de Crisis de Seguridad Alimentaria (EFSCM). El desarrollo sostenible de la acuicultura en la UE también puede contribuir a una mayor seguridad alimentaria. La acuicultura puede proporcionar suministro local de alimentos acuáticos con baja huella de carbono durante todo el año, lo que complementa el suministro disponible por parte de la pesca de la UE. El desarrollo sostenible de la acuicultura en la UE ha sido uno de los objetivos clave de la política pesquera común, tanto por su contribución a la seguridad alimentaria como al desarrollo económico de las zonas costeras y rurales.
-¿Han pensado en alguna medida para garantizar un terreno de juego igualitario (level playing field) para que la producción comunitaria no tenga que afrontar competencia desleal dentro su propio mercado?
-Antes de nada, debería recordarse que las importaciones de productos de la pesca y acuicultura tienen más de complementarios que de competencia en el mercado comunitario. De hecho, para atender la demanda de productos del mar, la UE necesita importar alrededor del 70% de los productos que consume. No obstante, existe un importante conjunto de normas y medidas del reglamento sobre la organización común del mercado (OCM) y la legislación general sobre productos alimenticios en relación con la seguridad y la higiene que se aplican a todos los productos puestos a la venta en el mercado de la Unión, independientemente de su origen. En particular, las normas comunes de comercialización brindan garantías sobre la sostenibilidad y permiten comparar productos, lo que facilita las actividades de comercialización. La normativa de etiquetado y de información al consumidor existen también para permitir que los consumidores tomen decisiones informadas. En la misma línea, la Comisión está planeando en el marco de la estrategia De la granja a la mesa mejorar la información sobre la sostenibilidad de los productos alimenticios. Estamos convencidos de que una mayor transparencia en este sentido puede contribuir a la competencia leal y la igualdad de condiciones en el mercado de la UE y que puede ayudar a los operadores con un desempeño positivo en sostenibilidad a valorizar mejor sus productos.
-¿Tomará la Comisión medidas comerciales contra Noruega por reasignarse unilateralmente la caballa?
-Primero me gustaría resaltar que las sanciones comerciales contra otra parte deben cumplir con una serie de requisitos legales. Tales medidas comerciales pueden ser objeto de litigio ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas, en la OMC o en el ámbito del Espacio Económico Europeo. Además, emprender ese camino implica considerar una amplia gama de dimensiones, siendo la pesca solo una de ellas. En este sentido, y además de la respuesta diplomática ya emprendida, la Dirección General de Asuntos Marítimos y Pesca está considerando y analizando, junto con otras direcciones generales de la Comisión, la viabilidad jurídica, las ventajas y desventajas de los distintos instrumentos que tiene la UE para responder a la autoasignación de cuotas de caballa por parte de Noruega y las islas Feroe. Sobre todo, no debemos perder de vista nuestro objetivo principal, que es llegar a una solución buena y razonable del problema. Para la caballa, eso significa llegar a un reparto justo con todos los Estados ribereños para el año 2023 y siguientes. Alcanzar dicho acuerdo garantizaría una utilización sostenible del recurso, al mismo tiempo que asegurará la transparencia y la planificación de los agentes del sector. Este es el mensaje que la Comisión, en representación de la UE, transmitió a los jefes de delegación de los Estados ribereños a lo largo de las consultas en curso. El camino hacia un acuerdo justo y equitativo requiere un compromiso sincero de todas las partes involucradas. En caso de que algunos no demuestren tal contribución para encontrar un acuerdo de beneficio conjunto, la Comisión aspira a explorar todas las opciones posibles para garantizar las expectativas justas y legítimas de la UE sobre la caballa en el Atlántico nororiental.
-¿Se impondrá un impuesto al combustible de pesca, como sugiere la estrategia Fit for 55?
-Bajo la estrategia Fit for 55, la Comisión se comprometió con nuevas iniciativas que tienen como objetivo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 55% por debajo de los niveles de 1990, de acuerdo con la agenda Green Deal de la UE. Una de estas iniciativas es la revisión de la actual directiva de fiscalidad de la energía (ETD), que actualmente prevé exenciones fiscales sobre el consumo de energía para algunas actividades económicas, incluida la pesca. La nueva propuesta de la Comisión plantea un tratamiento unificado de los sectores marítimo y fluvial, incluidas las actividades pesqueras, que reemplazaría la actual exención fiscal sobre los combustibles para estos sectores. Esta revisión de la ETD también propone poner fin a la exención en los sectores de la acuicultura. Somos conscientes del impacto que esto puede tener en las flotas de la UE, pero todos los sectores deben contribuir a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar la sostenibilidad en el sector. Esto es especialmente importante en estos tiempos difíciles que estamos viviendo en Europa, con la guerra en Ucrania y la crisis energética haciendo subir los precios en todo el continente. Afectan negativamente a la renta disponible de los ciudadanos europeos. La Comisión es consciente de que debemos seguir logrando el equilibrio entre la sostenibilidad económica de las flotas y la transición a una economía azul sostenible, asegurando el camino que ambiciona el acuerdo verde de la UE. Los volátiles precios de los combustibles fósiles comprometen la rentabilidad y socavan gravemente la resiliencia del sector. La mejor manera de avanzar es acabar con esta costosa dependencia y acompañar al sector a través de la innovación en el suministro de energía alternativa. En la DG Mare seguimos de cerca la situación económica y política que afecta al sector pesquero, al mismo tiempo que seguimos los debates en el Consejo sobre la ETD. Continuamos fomentando y participando en diálogos con todas las partes interesadas para evaluar la mejor manera de avanzar para el sector y estamos receptivos y listos para brindar apoyo si es necesario.
-¿Cómo puede ser el sector pesquero descarbonizado? ¿Hay tecnología, más allá de los remos? ¿Va a haber cambios en las reglas de construcción naval para permitir una mayor capacidad y la incorporación de energías alternativas como el hidrógeno, que actualmente requieren buques más grandes?
-Existen ya varias soluciones para descarbonizar el sector, empezando por las tecnologías de ahorro de energía, prácticas o patrones de pesca, materiales o artes más ligeros. El ahorro podría ser sustancial. Otras soluciones se basan en el uso combustibles alternativos o de energías renovables. La inversión en descarbonización es la mejor manera de lograr una mayor resiliencia y sostenibilidad del sector. El Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y Acuicultura (FEMPA) se puede utilizar para apoyar el desarrollo de tecnología baja en carbono y energéticamente eficiente, también a través de auditorías de eficiencia energética, estudios de viabilidad sobre nuevas tecnologías, pruebas y ensayos de nuevas tecnologías, difusión y transferencia de tecnología e innovación. También hay apoyo disponible para el reemplazo o modernización de los motores para embarcaciones de menos de 24 metros bajo ciertas condicione, e incluso para la reestructuración para aumentar el volumen de embarcaciones para instalar motores energéticamente eficientes, también sujeto a condiciones. Estas posibilidades demuestran que la Comisión está haciendo todo lo posible para apoyar al sector pesquero, especialmente en estos tiempos difíciles. La Comisión presentará un manual de mejores prácticas y últimas tecnologías para guiar a los pescadores individuales con esfuerzos graduales hacia la descarbonización de sus embarcaciones.
-¿Conoce qué otra salida laboral tendría un pescador de 45 años en un pueblo como, por ejemplo, Fisterra?
-Si bien las oportunidades laborales para los pescadores requieren un ecosistema marino saludable, los pescadores también pueden beneficiarse del apoyo de la UE para reforzar su resiliencia ante los desafíos actuales y futuros. Con el FEMPA, las autoridades españolas y gallegas podrán apoyar a sus pescadores con la compra de artes de pesca más selectivos y la diversificación de sus productos, a un mejor precio. Dado el interés y conocimiento de los pescadores sobre el medio marino y su biodiversidad, pueden desempeñar un papel activo como pastores del mar y desarrollar actividades de pesca-turismo sostenible. El FEMPA también brinda apoyo para mejorar la seguridad y las condiciones de vida a bordo, así como la eficiencia energética de los barcos de pesca. Estas son inversiones que beneficiarán no solo a los pescadores actuales, sino que también harán que la profesión sea más atractiva para los jóvenes, por ejemplo, mediante el desarrollo de embarcaciones menos contaminantes, la instalación de Internet y el aumento de la comodidad a bordo. Dado que España cuenta con una infraestructura de formación bien desarrollada con centros especializados en todo el país, también debería invertir en modernizar la formación e integrar nuevas tecnologías, lo que contribuirá directamente a mejorar las condiciones laborales de los profesionales de la pesca. Finalmente, el FEMPA también brinda mucho apoyo para el desarrollo y la diversificación de las actividades económicas en las comunidades costeras, lo que puede ser muy exitoso como lo demostraron los grupos de acción local de pesca (GALP) de Galicia en el último período del FEMP (Fondo Europeo Marítimo y de Pesca).
-¿Come pescado? ¿Cuál es su favorito? ¿Sabe cómo se pesca?
-Me gusta mucho el rodaballo, que es un pescado típico que se encuentra en el mar Negro, donde he pasado muchas vacaciones de verano. El rodaballo prefiere los cebos vivos.