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La Justicia argentina investiga de oficio las posibles mordidas en el reparto de merluza

cecilia vazdez BUENOS AIRES / E. LA VOZ

SOMOS MAR

Presidencia de Argentina | EFE

La Procuraduría de Investigaciones Administrativas y la Fiscalía Federal de Mar del Plata han abierto sendos expedientes y aquella ya ha pedido información al Consejo Federal Pesquero y a la Administración Pública

09 oct 2024 . Actualizado a las 04:46 h.

Después del escándalo desatado por la denuncia de las supuestas mordidas del Gobierno de Javier Milei en la asignación de cuotas de captura en el mar argentino, la Justicia del país ha decidido tomar cartas en el asunto. La Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA), y la Fiscalía Federal de Mar del Plata han abierto expedientes paralelos para investigar los presuntos sobornos denunciados en septiembre y que mantienen en vilo al sector pesquero. 

Según las versiones difundidas por distintos medios, emisarios del Gobierno nacional habrían solicitado 15 millones de dólares (13,5 millones de euros) a empresarios del sector pesquero para garantizar que el actual régimen de cuotas individuales transferibles de captura (CITC) de merluza común o hubbsi se mantuviera por los próximos 15 años. La información difundida hablaba de reuniones secretas en sótanos cercanos a la sede del Gobierno, en las que, en al menos una ocasión, habría intervenido una persona armada. En estos encuentros informales, los supuestos intermediarios del Ejecutivo de Milei invocaban venir en representación del asesor presidencial Santiago Caputo.

Si bien la primera denuncia penal ante la fiscalía de Mar del Plata fue hecha por el diputado de la provincia de Buenos Aires, Gustavo Pulti, en las últimas horas se ha conocido que la PIA, como órgano especializado en casos de corrupción de agentes de la Administración pública nacional, abrió una investigación de oficio. La PIA, a cargo del fiscal Sergio Leonardo Rodríguez, solicitó información al Consejo Federal Pesquero y a la Administración Pública para analizar la situación.

Revista Puerto publicó incluso las cantidades de las presuntas mordidas: habrían pedido cien dólares por tonelada de hubbsi y 1.000 por la de merluza negra. El dinero debía ser aportado por una docena de empresas «receptoras de unas 120.000 toneladas de merluza hubbsi», a lo que debían sumarse «3,3 millones de la merluza negra». Si bien las cuotas de merluza negra ya fueron asignadas, las de merluza hubbsi siguen pendientes, y el hermetismo de las distintas autoridades del sector es total.