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La pesca cree que los recortes de cuota contradicen el nuevo discurso de Bruselas

e. a. REDACCIÓN / LA VOZ

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Europêche

La patronal europea traslada su decepción al comisario en funciones, aunque sigue teniendo esperanza en la legislatura

27 sep 2024 . Actualizado a las 04:46 h.

Puede que sea la transición que se está viviendo en el seno de la Comisión Europea, pero lo cierto es que el sector pesquero está percibiendo clamorosas incoherencias entre lo que se declama políticamente y lo que realmente se está haciendo en el plano ejecutivo. Así se lo hizo saber la patronal comunitaria del sector, Europêche, al vicepresidente ejecutivo Maro Sefcovic, actual comisario de Pesca en funciones, y futuro responsable de Comercio —ventanilla que visitarán para exigir cláusulas espejo—, al que felicitaron por su nombramiento.

Porque al leer el programa político de la Comisión, que pone énfasis en la soberanía alimentaria, la resiliencia y la competitividad —según deslizó Von der Leyen—, el sector se esperaba «propuestas más equilibradas en materia de pesca». Y, sin embargo, con lo que se han encontrado de frente es con los «fuertes recortes sugeridos para muchas especies, como la anchoa en aguas ibéricas», y más rebajas en cuotas de captura incidental que ahora son ya mínimas y que complican la operatividad de la flota. Eso ya sin entrar en la cuestión de la soberanía alimentaria.

Toda una decepción cuando la propia Comisión Europea reconoce los importantes avances hacia una pesca más sostenible en la UE, en particular en el Atlántico nororiental. Pero eso no se traduce en cuotas más altas, pues la interpretación que el Ejecutivo hace de los dictámenes científicos sigue siendo «excesivamente precautoria», pues «reduce las cuotas en exceso y no se ajusta a las observaciones de los pescadores en el mar». La patronal insiste en exigir «una mejor garantía de calidad científica» y un enfoque equilibrado que tenga en cuenta también los factores económicos y la seguridad alimentaria.

De esta manera, pide a la Comisión más flexibilidad y un aumento del 10 % para las poblaciones de bacalao en el mar del Norte. También que suavice los recortes en el Mediterráneo, cuyo plan plurianual ya ha traído una reducción del 40 % en los días de pesca, cierres de zonas y restricciones de artes de pesca en los últimos cuatro años. Y en el Báltico habría que mejorar los datos científicos en lugar de recortar más cuotas, que son más simbólicas que efectivas, y abordar los problemas ambientales que afectan al ecosistema.

«Legislatura de la esperanza»

Pero a pesar de esa decepción, Europêche confesó a ?efcovic que ve la nueva legislatura con esperanza, porque se empieza a hablar de producción, competitividad, abastecimiento... no solo de peces. También que esperan que su relación continúe cuando Costas Kadis se haga cargo de la cartera y él recoja la de Comercio, porque el enfoque holístico es «crucial para mejorar un sector resiliente, sostenible y competitivo en el mercado mundial». Así, la patronal desgranó sus peticiones: reciprocidad comercial, cláusulas espejo y normas armonizadas en los mercados mundiales, garantizando, además, la importancia de que la competencia sea leal y en igualdad de condiciones. «Esperamos que las palabras se conviertan rápidamente en hechos, garantizando un futuro viable para nuestros pescadores. Europêche sigue comprometida a trabajar en estrecha colaboración con todas las instituciones europeas para mejorar la sostenibilidad de nuestra pesca, incluidas las dimensiones social y económica», expuso Javier Garat, presidente de la patronal.

Más contundencia con Noruega y mismas reglas para todos los atuneros del Atlántico

Europêche expresó su satisfacción en la entrevista por que en el nuevo diálogo de alto nivel de la UE con Noruega, la Comisión haya incluido la pesca en conversaciones diplomáticas más amplias. Unas conversaciones que el sector seguirá de cerca. La patronal animó al Ejecutivo a «adoptar una postura firme contra las prácticas no cooperativas e irresponsables de Noruega, incluida la fijación unilateral de cuotas excesivas para la caballa y el acaparamiento de cuotas para el bacalao». Por eso reiteró su aplauso a la propuesta legislativa de la Comisión que permitirá a la UE adoptar medidas más concretas contra las prácticas pesqueras insostenibles de países no pertenecientes a la UE, y reforzar el proceso de cooperación.

Los miembros de Europêche también expusieron el lastre a la competitividad que la flota atunera comunitaria tiene en la Iccat (Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico), al ser la única que está obligada a respetar en el océano Atlántico la moratoria temporal en el uso de objetos, o dispositivos de agregación de peces (FAD, por sus siglas en inglés). Los buques no comunitarios pueden emplearlos y los europeos no. Esa desigualdad, en un contexto en el que las poblaciones de atún gozan de buena salud, no tiene sentido, por lo que piden la supresión de la moratoria o, cuando menos, la reducción a un mes para evitar el colapso de la flota de cerco de la UE, cuyos buques y capturas ya han caído un 40 % desde el 2016.