Agricultura quiere repartir la cuota de quenlla para evitar la pesca olímpica
SOMOS MAR
Consulta al sector qué fórmulas podrían aplicarse para gestionar la especie e impedir que el cupo se agote prematuramente
17 may 2024 . Actualizado a las 09:35 h.El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha abierto una consulta pública una modificación del real decreto que regula la actividad en los caladeros nacionales para recoger opiniones sobre cómo debe gestionarse la cuota de quenlla, tintorera o tiburón azul (Prionace glauca) para evitar que una pesca olímpica pueda hacer que se agote las toneladas asignadas a España antes de que se acabe el año.
Recuerda el ministerio que en noviembre del 2023, la Comisión Internacional para la Conservación del Atún del Atlántico (Iccat) impuso más restricciones a los totales admisibles de captura de la especie; así, recortó las posibilidades para España en el Atlántico norte y fijó una cuota en el sur. En la parte más septentrional del océano no debería haber problemas, según fuentes del sector, dado que no se suele agotar el cupo, pero en el sur el límite se fijó en un porcentaje por debajo de lo que se estaba capturando.
Ocurre que estos stocks no están repartidos por barco y el consumo se realiza contra una bolsa común, lo que podría alentar esa pesca olímpica que llevaría a sobrepasar el volumen autorizado, de ahí que la Secretaría General de Pesca estime pertinente realizar una distribución por embarcación.
Los armadores también están a favor de un reparto, ya sea por organizaciones de productores como por embarcaciones, pero no todos están de acuerdo en cómo abordar esa distribución. Un reparto de cuota que, además, tiene que coincidir con la cantidad que recoge el dictamen de extracción perjudicial perceptivo para poder comercializar la especie, después de su entrada entre las especies protegidas del apéndice II de la CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres).
Tampoco entiende muy bien el sector que ese reparto se haga mediante la modificación de un real decreto que regula la actividad pesquera en los caladeros nacionales, cuando la quenlla se captura en aguas internacionales.