Patrocinado porPatrocinado por

Ernesto Penas: «CITES fue una idea excelente para proteger al rinoceronte africano, pero no sirve para el tiburón»

E. Abuín REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

M.MORALEJO

El presidente de la ICCAT afirmó en el congreso Interfish sobre sostenibilidad que la pesquería de palangre de superficie es una de las mejores gestionadas del mundo

17 abr 2023 . Actualizado a las 11:17 h.

La pesquería de palangre de superficie, gallega donde las haya, es «una de las mejores gestionadas del mundo» y no tiene que tener «complejo alguno de estar defraudando la sostenibilidad». Esto que pudo escuchar en el congreso Interfish en Vigo —en el que precisamente de analizó la sostenibilidad de esa flota—, cobra más relieve e importancia si el que lo dice es Ernesto Penas, presidente de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) y antes director general de Coordinación y Desarrollo de Políticas de la DG Mare (Dirección General de Asuntos Marítimos y Pesca.

Penas se muestra muy crítico con la inclusión de la quenlla o tintorera (Prionace glauca) en la lista de especies amenazadas de la CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres) de las que hay que controlar su comercio por su simple parecido razonable con otras especies que sí están protegidas y en peligro.

—¿Qué le parece la inclusión de la quenlla entre las especies que requiere certificado CITES para venderse?

—Mal, por dos motivos. Primero, porque es meterse en el terreno de otras organizaciones que hacen el trabajo mejor que ellos. Y en segundo lugar porque la base científica de la que ellos disponen, no tiene nada que ver con la de ICCAT y desde luego es una base científica mucho menos informada que la de ICCAT. Se meten en un terreno que no es el suyo, que es la gestión pesquera y establecen —con criterios con los que no estamos de acuerdo— que la quenlla es una especie vulnerable cuando en ICCAT se considera que es sostenible. Por eso somos críticos con la decisión.

—¿Es posible revertirla?

—ICCAT no puede hacer nada para revertirla. Son organizaciones diferentes y por mucho que diga la ICCAT ‘yo sostengo lo contrario' no va a ser posible. Los que lo pueden revertir son los Gobiernos de los países que representan (por ejemplo, la UE) en CITES. Que por lo menos alguno de ellos diga ‘oiga, que lo que está usted proponiendo aquí ya lo está haciendo ICCAT, lo está haciendo bien y el recurso es sostenible; ¿por qué quiere meterlo entre los stocks amenazados.' Lo que hace falta es eso y eso lo tienen que hacer los Gobiernos y la Unión Europea.

—Pero La UE no lo va a hacer... Votó a favor de la medida.

—Una prueba más de que la política europea está cada vez más dominada por intereses medioambientales.

—Ha dicho en el foro que vienen más curvas para el palangre de superficie. ¿Por qué?

—Porque a pesar de todo lo que se ha hecho en materia de biodiversidad se nos va a pedir mucho más. El Tratado de Alta Mar (BBNJ), la Convención de Biodiversidad (BCD), la Ley de Restauración de la Naturaleza... Y como va a haber que hacer mucho más lo que habría que fijar es cómo se va a hacer, quién lo va a hacer y consultando a quién.

—¿Le correspondería a...?

—Entiendo que las más a las organizaciones regionales de Pesca (ORP). CITES tiene un gran problema, lo que yo llamaría un pecado original. CITES fue una idea excelente cuando surgió hace años para defender o para proteger al rinoceronte y al elefante africano. La gente, con toda la razón del mundo, decía que si no existiera el mercado del marfil o del cuerno de rinoceronte los furtivos no irían a matarlos. Prohibamos ese mercado y se acaban los problemas. Pero entonces, animados por el éxito empezaron a aplicar esa filosofía a especies que no tienen absolutamente nada que ver y empezaron a adoptar medidas poco adaptadas a la práctica, por ejemplo, en las aletas. En el caso del cuerno de rinoceronte, cierras la exportación de África a Asia y ya se acabó con el mercado. Pero si se prohíbe vender alertas, la flota china, que es la más grande del mundo, sigue pescando tiburón, cortando aletas y vendiéndolas en su mercado, ¿qué has conseguido? Pegarte un tiro en el pie y que se sigan cortando millones de aletas. Para cierto tipo de especies y de mercados es útil, pero para otros no. Se está aplicando un poco el corta y pega: ‘¡Ah! Esto sirve para el cuerno de rinoceronte, pues para las aletas de tiburón, o para el atún rojo'. Y en lugar de plantearse cómo está la quenlla y preguntárselo a los que saben, que son los científicos de ICCAT, elaboran un informe paralelo unos expertos que no son expertos. En lugar de formar un comité de la señorita Pepis, de gente que te diga lo que quieres escuchar, vas a los que saben y entonces tomas las medidas que quieras, pero sobre una base sólida y encima te aseguras una coordinación de los científicos y no estás creando dos mundos paralelos incompatibles.