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El patrón del barco que rescató a los náufragos del Vilaboa Uno: «Hemos podido salvar a seis; eso es con lo que me quedo»

E. A. REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

Juan Manuel Serrano Arce | EUROPAPRESS

Antonio Fernández conocía al patrón del pesquero hundido, que perdió la vida en el siniestro

03 abr 2023 . Actualizado a las 17:52 h.

El Siempre Nécora tiene base en Colindres. El arrastrero, como el Vilaboa Uno, empezaba la semana poniendo ruta al caladero para pescar xarda. Al mando, Antonio Fernández Sanjosé. Se dirigía a San Vicente de la Barquera, pero cambió el rumbo en cuanto Salvamento Marítimo los avisó de que un barco se hundía frente a Santander. Media hora tardó en recorrer esas cuatro millas y pico que lo separaban del pesquero en apuros. Sin embargo, cuando llegó, ya no vieron «ni barco ni nada», solo algún pertrecho y boyas. Ni siquiera aparecía en el radar rastro del barco santanderino, contó el patrón del Siempre Nécora a los medios ya en el Barrio Pesquero de Santander.

Fernández y su tripulación consiguieron rescatar a seis personas con vida. A la séptima que recogieron no lograron reanimarla. Cómo los subieron a bordo lo relató un marinero del Siempre Nécora, Antonio Peque. Dijo que la tripulación estaba durmiendo cuando recibieron el aviso de auxilio y al llegar vieron «lucecillas y a la gente pidiendo ayuda. Los hemos metido en el barco casi todos a la vez; a dos con la grúa, porque no podíamos con ellos. Nosotros, por el costado, que no soltaban al fallecido; no lo soltaban, yo creo que ya estaba fallecido», narró en declaraciones recogidas por Europa Press. Al otro tripulante muerto, que estaba alejado del lugar, lo rescataron los prácticos de Santander.

ROMÁN G. AGUILERA | EFE

Cuando ya habían tenían a bordo a los marineros y ya les había dado tiempo a llegar a otras embarcaciones, «nos mandaron ir hacia tierra». Lo hicieron «avante toda» y llegaron en media hora.

El patrón del Siempre Nécora comentó que los marineros estaban en shock. No les preguntaron qué había ocurrido. Les dieron ropa, cosas calientes, atendieron al senegalés que estaba herido... Por eso también los enviaron a puerto, para salvar la vida de este tripulante que «estaba tieso y echaba espuma por la boca». Y lo salvaron, porque a primera hora de la tarde el marinero había sido dado de alta.

Fernández Sanjosé tenía mucha amistad con el patrón del Vilaboa Uno, muerto en el siniestro. Pero «no hace falta ser amigo para rescatar una vida de un ser humano». Es más, si no hubiesen llegado casi al momento, «¿qué hubiera pasado?» Mejor no pensarlo. «Hemos podido salvar a seis; eso es con lo que me quedo», dijo el patrón del Siempre Nécora.