Funcionarios llevan al ministerio ante Inspección de Trabajo por las carencias en materia de riesgos laborales
20 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Inspectores de Pesca Marítima integrados en Apipes (Asociación Profesional de Inspectores de Pesca) han interpuesto una denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social contra los ministerio de Agricultura y Pesca y Política Territorial porque no se les ofrece la formación en prevención y seguridad marítima adecuada para desarrollar su misión a bordo de embarcaciones y helicópteros. Esas carencias formativas han llevado a algunos funcionarios a negarse a embarcar, al menos hasta que estén lo suficientemente informados y formados sobre los peligros que conlleva su trabajo a bordo y cómo afrontarlos. ¿Es que «tiene que morir un inspector de pesca en un terrible accidente para que se tomen las medidas oportunas» y se les forme convenientemente?, expresan en un comunicado.
El colectivo profesional, que asegura que la Inspección de Trabajo ha admitido su denuncia, explican que ejercen labores de vigilancia a pie de muelle, en lonjas, almacenes y en medios aéreos y navales. Y, además, tienen un máximo exigible de días embarcados. Según relatan, en la última evaluación de riesgos laborales, que data del 2009, se proponía como formación mínima obligatoria la misma que se le exige a los profesionales de la pesca para obtener la libreta marítima; esto es: técnicas de supervivencia personal, primeros auxilios, prevención y extinción de incendios y seguridad personal. En definitiva, un curso de prevención de riesgos laborales de no menos de 70 horas y con actualización periódica. Sin embargo, los inspectores están embarcando «sin recibir la formación en seguridad requerida en la normativa vigente», aseguran.
El último curso homologado de formación básica se impartió en el 2005. Y aunque en los últimos años recibieron nociones de normas básicas de seguridad a bordo, nunca fue de más de 20 horas y su contenido, que ha ido variando con los años, no incluye las materias del certificado homologado. Eso, los antiguos. Los nuevos, peor. Antes de realizar las prácticas de inspecciones marítimas, reciben una formación de apenas 8 horas.
Por tanto, se da la circunstancia de que el inspector de pesca que embarca es el único trabajador del buque «que carece de formación sobre los peligros» que existen a bordo y de cómo afrontarlos, dicen desde Apipes. Y eso que cada año solicitan a Agricultura que se imparta esa formación. Sin éxito.
Por eso ahora, y tras varios accidentes en el mar sufridos por inspectores, algunos de ellos graves, según dicen, se ven «en el más absoluto desamparo», pues en esos casos, la Administración «lejos de iniciar investigaciones e impartir la formación que se reclama se desentienden como si tener que abordar un pesquero a 200 millas de la costa y entre olas de dos metros tuviese el mismo riesgo que el personal administrativo de cualquier dependencia». Advierten de que «los riesgos son reales» y hacen referencia a casos como los del Villa de Pitanxo, el Piedras, el Selena Tercero y hasta el patrullero tailandés que se hundió dejando 33 tripulantes desaparecidos.
Manifiestan que son conscientes de que «se está realizando una revisión de la evaluación de riesgos laborales por los servicios de prevención en diferentes provincias, pero no están cubriendo los embarques ya que, según el propio personal de prevención, no disponen de la formación para ello». Un «bucle absurdo» en el que los responsables de evaluar no lo hacer por no disponer de una formación que «nos niegan» y, por otro, la irresponsabilidad de continuar programando los embarques. Y lo mismo ocurre con los inspectores que trabajan con medios aéreos, pues hay funcionarios que no tienen los cursos perceptivos o los tienen caducados, afirma Apipes.
Y ya en el caso de operar en un puerto, no en una oficina, no han recibido formación en prevención nunca. Este periódico se ha puesto en contacto con el Ministerio de Agricultura sin haber obtenido respuesta.