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Un vigilante de la cofradía de Cabo de Cruz denuncia haber sufrido una agresión por parte de un furtivo

C. S. RIBEIRA / LA VOZ

SOMOS MAR

CEDIDA

Los hechos se sucedieron tras haber interceptado al infractor con una bolsa llena de almeja japónica

29 dic 2022 . Actualizado a las 08:41 h.

Un vigilante de la cofradía de Cabo de Cruz denuncia haber sufrido una agresión por parte de un mariscador furtivo. Supuestamente, los hechos se sucedieron tras haber interceptado al infractor con una bolsa llena de almeja japónica que habría sido extraída de forma ilegal.

«Es un furtivo habitual, lo vi pasar con una bolsa debajo del brazo agarrándola con las dos manos. Decidí adelantarlo con el coche y paré a la altura de Escarabote», explica el vigilante. Además, según reporta el denunciante, el individuo presentaba mojaduras y restos de arena en los zapatos, por lo que le solicitó que mostrase el contenido de la bolsa.

Al parecer, el hombre se negó, motivo por el que se inició un forcejeo entre los dos que acabó con una caída del vigilante sobre un coche aparcado, ocasionando una abolladura en el turismo. «En ese momento me propinó varios puñetazos a la altura de las rodillas. Durante el conflicto, ambos caímos al suelo y conseguí reducirlo», explicó el guardapesca, afirmando que el furtivo también le amenazó.

Una vez finalizado el forcejeo, fueron decomisados un total de 10,40 kilogramos de almeja japónica extraída ilegalmente, motivo por el que el trabajador de la cofradía presentó un parte de lo acontecido. Además de esto, señaló que denunciará los hechos ante la Guardia Civil.