Patrocinado porPatrocinado por

Bruselas se resiste a vetar el pescado de Noruega en castigo por asignarse xarda

jesús carballo BRUSELAS / LA VOZ

SOMOS MAR

PEPA LOSADA

La Eurocámara carga contra el Ejecutivo comunitario y pide sanciones ya

23 oct 2022 . Actualizado a las 18:20 h.

La Comisión Europea no parece estar por la labor de abandonar la vía del diálogo, coger la sartén por el mango y tomar medidas comerciales como piden tanto el Parlamento Europeo como la flota comunitaria ante una nueva asignación unilateral de cuota de caballa por parte de Noruega y las islas Feroe para este 2022. «No tenemos competencia para bloquear estas acciones de manera aislada», aseguraba Fabrizio Donatella, el representante del Ejecutivo comunitario invitado a una reunión del Comité de Pesca de la Eurocámara para intercambiar puntos de vista con los parlamentarios allí presentes.

El país nórdico ha vuelto a repetir la jugada del año pasado y se ha asignado unilateralmente la cuota de xarda que considera oportuna, al margen de los demás Estados implicados en la pesquería. Ha decidido reservarse el 35 % de la cuota recomendada por los científicos sin contar con los demás y trata de lavar su imagen diciendo que es un 7 % inferior a la que se reservó el año anterior.

«La UE tiene una relación multilateral con los Estados costeros pero debido al brexit se ha complicado aún más» y, al negociar, «la falta de marco jurídico puede complicar mucho las gestiones de estas decisiones autónomas», añadía Donatella. Por más que los Veintisiete tratan de que los países implicados en la gestión de la xarda retomen un pacto como el que alcanzaron en el 2014 para la gestión conjunta de especies compartidas con Noruega, islas Feroe e Islandia, no lo acaban de conseguirlo, ahora que, además, ha entrado en juego el Reino Unido.

Insistencia en dialogar

«Estamos en continuo contacto con nuestros interlocutores de Noruega y las islas Feroe», subrayaba el delegado de la Comisión, al tiempo que manifestaba que «no está todo perdido» y que «no hay que bajar los brazos» para «volver a obtener los derechos y el reparto legítimo que se ha visto alterado».

El Ejecutivo comunitario considera que, para no volver a tropezar de nuevo con la misma piedra, hay que hacer todo lo posible por «volver a un nivel satisfactorio de estabilidad tomando el acuerdo del 2014 como punto de partida para el reparto de la caballa a partir del 2023».

Medidas restrictivas

Pero aunque debe agotarse la vía del diálogo, este no puede durar eternamente. Sobre todo cuando se ven perjudicados los intereses comunitarios, opinan los miembros del Comité de Pesca de la Eurocámara. Estos no dudaron en mostrar su disconformidad ante las explicaciones de la Comisión. «Si seguimos así, dentro de cuatro años estaremos en las mismas y deberíamos optar por una serie de contramedidas», afirmaba el eurodiputado neerlandés del grupo de conservadores y reformistas europeos Bert-Jan Ruissen. Medidas como «restringir la importación de productos de pesca noruegos o el acceso a los puertos de la Unión de sus barcos pesqueros», apuntaba el gallego Francisco Millán Mon. No es la primera vez que se aplican, recordó el eurodiputado, pues en el 2013 «se prohibieron las importaciones de arenque y caballa de las islas Feroe y eso tuvo efecto casi inmediato», pues se avino a negociar un reparto. Y es hora de dar un golpe en la mesa porque «estos líos de la caballa son ya antiguos y cada vez van a peor».