Familias de víctimas del Villa de Pitanxo, indignadas al saber que el Gobierno manda un barco a Terranova sin material para bajar al pecio
SOMOS MAR
Piden que se paralice la partida del Vizconde de Eza de Vigo para comprobar si puede llevar el material para bajar al pecio y anuncian que se manifestarán «en la puerta del señor Sánchez»
03 jun 2022 . Actualizado a las 12:52 h.No es la primera vez que los familiares de las 21 personas que fallecieron en el naufragio del Villa de Pitanxo, ocurrido a 250 millas de Terranova el 15 de febrero pasado, aluden a que España envía desde hace años buques oceanográficos a las aguas de la NAFO (Organización de Pesquerías del Atlántico Norte) para evaluar los stocks de las especies de interés para la flota pesquera española que allí faena, como era el caso del buque siniestrado de Pesquerías Nores. Y tampoco es la primera vez que sugieren que bien podía aprovecharse el desplazamiento de esos buques oceanográficos para realizar la operación que demandan prácticamente desde el día siguiente al hundimiento del barco en las profundidades del Atlántico: localizar el pecio y enviar un robot para tomar imágenes, comprobar si hay cuerpos en su interior, recabar pruebas y obtener la mayor información posible que ayude a clarificar las causas del naufragio y a tomar medidas para impedir que siniestros como el que se cobró 21 vidas vuelvan a repetirse.
Pero sus reflexiones y peticiones han caído en saco roto, al parecer. El Instituto Español de Oceanografía (IEO) anunció que el próximo domingo zarpará del puerto de Vigo el Vizconde de Eza con científicos del propio Oceanográfico, del CSIC y del portugués IPMA para desarrollar las campañas campañas Platuxa, Flemish Cap y Fletán Negro 3L. Esas prospecciones mantendrán al buque del Gobierno español (pertenece a la Secretaría General de Pesca) durante tres meses en el área donde trabajaba el Villa de Pitanxo. Lleva a bordo material para tomar el pulso del bacalao, fletán negro, camarón, gallinetas, limanda, platija, mendo, granaderos o rayas, entre otros. Pero no lleva nada para buscar el rastro del Villa de Pitanxo.
«Estamos hoy más que nunca decepcionados», manifestó María José de Pazo, portavoz del colectivo, expresando la indignación de los familiares porque «no se nos ha comunicado a ninguna de las familias y no se nos ha preguntado por el del ofrecimiento de una empresa de Noruega que pone a disposición del Gobierno de España de forma totalmente gratuita un robot y una sonda de barrido lateral». «Es totalmente intolerable», añadió De Pazo incidiendo en que los allegados de las víctimas llevan meses diciendo que hay medios suficientes para abordar la misión que piden, como ahora se demuestra. Critica la pasividad del Gobierno porque, «sabiendo los plazos limitados que tenemos, (los trabajos deben hacerse durante el verano por cuestiones meteorológicas) ni nos avisan, ni contactan con nosotros y ni siquiera con la Xunta, que se ofreció a financiar la operación».
Esa indignación que sienten la expresarán para la semana con acciones: «Vamos a ir con pancartas a Madrid a la puerta del señor Sánchez, ya sea en el Congreso, en la Moncloa o donde haga falta», anunció De Pazo. Irán de la mano con los sindicatos que les han manifestado su apoyo.
Además, las familias van a pedir pedir que, si según los informes técnicos, «ese buque puede llevar el robot y el sónar» que les han ofrecido, «que se paralice la salida del oceanográfico y se embarque el material para bajar al barco».