Patrocinado porPatrocinado por

Los pósitos cargan contra bateeiros por movilizarse y pedir la dimisión de la conselleira

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

Martina Miser

Reprochan al colectivo su «prepotencia» y sugieren que sus bateas ocupan demasiado espacio en las rías, sustrayendo área de actuación a la flota artesanal

13 may 2022 . Actualizado a las 04:52 h.

Es probable que al Gobierno gallego no le haya hecho gracia que los mejilloneros hayan convocado una protesta para el sábado, día de la investidura de Alfonso Rueda como presidente de la Xunta. Pero nada ha dicho. Sí lo han hecho las cofradías de pescadores, que cargan abiertamente contra los bateeiros clamando su repulsa por la convocatoria de la protesta y reprobando, asimismo, las peticiones de dimisión que han hecho para la conselleira de Mar, Rosa Quintana, y para la directora xeral de Desenvolvemento Pesqueiro, Susana Rodríguez.

En un comunicado conjunto, la Federación Galega de Confrarías y cada una de las federaciones provinciales (A Coruña, Pontevedra y Lugo) cargan contra los bateeiros, a los que acusan de mantener una «postura prepotente para negociar» al levantarse de la mesa de negociación en lugar de intentar llegar a acuerdos. «Un sector mexilloeiro responsable e sensato debería admitir e recoñecer que é indispensable establecer espazos de reserva para protexer as poboacións máis ricas de percebe en Galicia e que non se trata de causarlle prexuízos ao sector acuícola, senón que o obxectivo da norma é garantir a sostibilidade e a explotación do recurso, da que subsisten máis de mil familias» en Galicia, apuntan.

Se muestran indignados por la reacción de los bateeiros porque tan solo se ha vedado el 17 % de la costa gallega a la extracción de mejilla, en una actuación que, además, recalcan, está amparada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), en respuesta a un contencioso interpuesto por los mejilloneros. También porque fueron ellos que «romperon o diálogo e, por tanto, un posible acordo entre os sectores», dicen las cofradías. Y porque no deponen sus protestas a pesar de todos los ofrecimientos que les ha hecho la Consellería do Mar, como poder extraer cría todo el año, aumentar el número de cuerdas colectoras, creación de hatcheries, etcétera.

Las cofradías ensalzan la labor de Quintana y de Rodríguez y no entienden que los bateeiros pidan su dimisión cuando la conselleira «lles puxo o contador a cero das concesións» y les amplió el plazo de ocupación de 30 a 50 años. Los pósitos sostienen que los bateeiros tienen «un claro sentimento de propiedade, de predominio e de prepotencia sobre os demais sectores profesionais do mar». Así, las cuatro federaciones dejan caer que hay una falta de control en la actividad de extracción de la mejilla y que las bateas ocupan demasiado espacio: «Tampouco podemos deixar de obviar a falta de control que ten o sector acuícola na actividade extractiva da mexilla, tanto en cantidades, días e zonas de extracción; así como tamén a inmensa zona de ocupación de espazo marítimo que teñen as bateas nas rías galegas, as que antes eran moi produtivas e nas que habitualmente faenaban as embarcacións da frota pesqueira artesanal».