Arranca el juicio de la operación Estrada, en la que el Erpol detuvo a un grupo de furtivos de almeja en Boiro
SOMOS MAR
La Guardia Civil llegó a interceptar más de un centenar de kilos de molusco en el maletero de un coche
18 ene 2022 . Actualizado a las 04:47 h.El Juzgado de lo Penal Número Uno de Santiago acogió ayer la apertura del juicio oral de la operación Estrada, llevada a cabo en Boiro en el 2017 por el Equipo de Respuesta Policial (Erpol) de la Policía Autonómica. En las diligencias de los agentes se acusaba, presuntamente, a un grupo de casi una decena furtivos de esquilmar almeja en las concesiones de la cofradía de Cabo de Cruz, bivalvo que posteriormente vendían en una depuradora de la localidad. También se señalaba a un taxista de estar presuntamente implicado en la circulación del marisco desde la playa, ya que llegó a ser interceptado por la Guardia Civil del puesto de Boiro con más de un centenar de kilos de este producto en el maletero de su vehículo.
Fueron todos ellos los primeros en sentarse ayer en el banquillo santiagués, acogiéndose a su derecho a no declarar, según apuntaron fuentes de la defensa de la cofradía de Cabo de Cruz. El pósito solicita penas de dos años de prisión para los furtivos y el taxista, a los que considera presuntos culpables de un delito de furtivismo; y pide tres de prisión para el encargado de la depuradora por presunta interceptación ilegal.
Durante la investigación, los agentes de la Policía Autonómica siguieron a este grupo de furtivos durante meses, realizando incautaciones periódicas, actuaciones documentadas con fotografías y vídeos. Con operativos de incluso 24 horas, los funcionarios estuvieron durante seis meses pisando de forma asidua los arenales de la cofradía crucense.
El juicio de la operación Estrada continuará mañana en Santiago de Compostela. Será el momento en que comparecerá la ex patrona mayor de la cofradía de Cabo de Cruz, Raquel Souto, así como la bióloga del pósito. También están llamados seis agentes del Erpol de la Policía Autonómica, entre los que destaca su responsable, Fernando Molina. Se espera la comparecencia de otros cuatro guardia civiles del puesto de Boiro.
Última sesión
Según apuntan fuentes del pósito, el juicio tendrá una última vista el viernes, cuando están previstos los alegatos finales. La defensa de la cofradía reconoció que el trabajo policial está realizado con gran detalle, ya que en las pesquisas hay material de todo tipo que presuntamente inculpa a los furtivos.
Es por ello que esperan que se aplique la nueva legislación vigente para los delitos de esta índole, y que incluso puede llevar a los condenados a recibir penas que incluyen la prohibición de pisar ciertos arenales durante meses o años.