La empresa de A Pobra presentó los resultados de la digitalización de su planta
24 sep 2021 . Actualizado a las 10:06 h.La fábrica inteligente está cada día más cerca de ser una realidad. Así lo ha demostrado Congalsa, durante la primera edición del Acto de Difusión del proyecto Congals4.0: Deseño e desenvolvemento dun modelo industrial 4.0 no sector de alimentación galego. La empresa de A Pobra, en colaboración con Gradiant, Centro Tecnolóxico de Telecomunicacións de Galicia, ha demostrado lo que es posible hacer si se potencia la investigación y la digitalización en la competitividad del sector industrial.
Durante el acto, los asistentes que participaron por videoconferencia pudieron escuchar el propósito de un proyecto de tanta envergadura como este. Como explicó Luis Miguel Simarro, director general de Congalsa, «se trata de desarrollar un modelo industrial más flexible, que nos permita anticiparnos a las demandas del mercado con criterios de sostenibilidad, transparencia y personalización».
Tras la presentación, los objetivos de la iniciativa y sus resultados fueron debatidos con la directora de I+D de la empresa, la doctora Mónica Cascallar, y el responsable de Industria Área de Sistemas Inteligentes de Gradiant, Daniel García. Durante la tertulia, ambos remarcaron el tamaño del plan de digitalización, que comenzó en el 2019 e incluye a varios departamentos de la firma pobrense. «Estamos buscando una fábrica muy flexible, y para eso tenemos que saber qué es lo que quiere la gente, dárselo rápido, pero sin perder esa calidad», apuntó Cascallar. Por su parte, Daniel García insistió en la importancia de la recolección de datos para poder tomar esas decisiones rápidas: «Sin información no se pueden tomar mejores decisiones. En un ambiente como el de una fábrica, que es multi lenguaje, se necesita un sistema de información estandarizado y centralizado».
Realidad aumentada y blockchain para mejorar procesos
Con respecto a los usos que están haciendo de las diferentes tecnologías, en las intervenciones se destacaron algunos como la realidad aumentada para facilitar la detección de defectos para los operarios de fábrica o la trazabilidad de los productos usando tecnología de blockchain. Este último sirve sobre todo para poder participar mejor de la economía circular en lo que a envases de productos se refiere. Sobre los problemas que surgieron durante la puesta en marcha, ambos ponentes enfatizaron el impacto de la pandemia. «Yo me quedo con lo bueno», comentaba Cascallar, «al final esto nos ha servido para perderle el miedo a las tecnologías, para reafirmarnos aún más en la necesidad de este proyecto».
Finalmente, en cuanto a la dificultad de implantar estos cambios en el personal, tanto Mónica Cascallar como Daniel García insistieron en que el personal de Congalsa se había adaptado muy bien, y les habían ayudado a reorientar sus ideas en varias ocasiones. «Los proyectos 4.0 se asocian a la revolución», señaló la directora de innovación, «pero la revolución empieza con las personas y solo triunfan si las personas están implicadas, entienden el cambio y las haces partícipes del mismo». García se hizo eco también de esta idea y remarcó la importancia del aporte de los trabajadores de la fábrica: «La digitalización tiene que ir de la mano del personal. Las personas son las que conocen bien los procesos y lo que hacen en el día a día».
El acto se cerró con la intervención de la directora de la Axencia Galega de Innovación (GAIN), Patricia Argerey. La directora calificó el proyecto Congals4.0 de «éxito», y puso en valor el apoyo de la Xunta en este tipo de iniciativas. Su programa, Fábrica Intelixente, cubre 24 proyectos de I+D+i en toda Galicia con ayudas de casi 73 millones de euros, de las que Congalsa ha recibido 2,3 millones. Argerey alabó también la colaboración entre los diferentes agentes en el proceso de innovación y destacó el lugar de Galicia como segunda comunidad autónoma en apostar por la innovación en colaboración entre varios agentes.