La patrullera Arnomendi vigilará a los arrastreros pelágicos que vienen al bonito al Cantábrico

La patrullera de la Armada Arnomendi, que el pasado 25 de mayo partió de Ferrol para desarrollar de forma consecutiva tres campañas de vigilancia e inspección de pesca, recalará este viernes en Vigo. Este buque realiza estas tareas de control en aguas del Cantábrico y el noroeste peninsular en el marco del plan general de vigilancia de pesca del Gobierno, según han trasladado fuentes de la Escuela Naval Militar de Marín.

La patrullera de altura zarpó el pasado mes de Ferrol para desarrollar dos campañas de vigilancia e inspección de pesca en el caladero nacional y la costera del bonito durante un período de 60 días.

Tras finalizar la primera campaña en el Cantábrico, ha comenzado a realizar tareas de vigilancia en la costera del bonito, en el marco de las que atracará este viernes en Vigo para permitir el descanso de la dotación y el relevo de personal.

No obstante, no se llevarán a cabo jornadas de puertas abiertas durante la estancia del Arnomendi en la ciudad olívica, que finalizará este domingo, debido a las restricciones aplicadas por la pandemia de la covid-19.

Posteriormente, este domingo el patrullero continuará los trabajos de vigilancia e inspección de buques y, en concreto, de las parejas de arrastre pelágico centrados en la pesca del bonito para verificar el cumplimiento de la normativa vigente. Para ello, contará con la participación de una inspectora de la Secretaría General de Pesca, además de llevar a cabo labores de apoyo a la flota dedicada a estas capturas.

El Arnomendi representa el tercer buque de la clase Chilreu y fue construido en los Astilleros Freire de Vigo en el año 2000. Este patrullero, encuadrado en las Unidades de la Fuerza de Acción Marítima en Ferrol, está al mando del capitán de corbeta Juan Manuel Garat González y cuenta con una dotación de 40 personas.

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