La Eurocámara plantea que cada Estado destine a la pesca artesanal el 7% del fondo de ajuste del «brexit»
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Acuerda cubrir también las inversiones realizadas antes del fin del período de transición
27 may 2021 . Actualizado a las 14:08 h.La Comisión de Desarrollo Regional fijó el martes su postura acerca del fondo de reserva de ajuste del «brexit», el instrumento llamado a mitigar el impacto social y económico provocado por la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
La partida, de 5.000 millones de euros en el 2018 (a precios corrientes son ya 5.400 millones) se establecerá como un fondo especial fuera de los límites presupuestarios del Marco Financiero Plurianual (MFP) 2021-2027 y que tendrá en cuenta, según decidieron los eurodiputados, el comercio, la pesca y la población de las regiones marítimas vinculadas al Reino Unido.
Esos recursos se desembolsarán en tres tramos: 4.000 millones repartidos en dos montantes idénticos, de 2.000 millones cada uno, se distribuirán este año y el que viene. Los 1.000 restantes se liberarán en el 2025 sobre la base de los gastos notificados a la Comisión, teniendo en cuenta la prefinanciación.
Además, los eurodiputados acordaron apoyar el gasto público realizado entre el 1 de julio del 2019 y el 31 de diciembre del 2023, extendiendo así la cobertura a las inversiones realizadas antes del final del período de transición, el 1 de enero de 2021, en preparación para los efectos negativos esperados del «brexit». Asimismo, la Comisión de Desarrollo Regional también exigió que las entidades financieras y bancarias que se benefician de la salida del Reino Unido de la UE sean excluidas de recibir fondos de la reserva de ajuste.
Fijaron asimismo una serie de capítulos esenciales, como la ayuda a la pesca artesanal a pequeña escala y las comunidades locales que dependen de las actividades pesqueras en aguas del Reino Unido y sugiere que cada país afectado destine al menos el 7 % de la asignación del fondo que le corresponde. También plantea ayudar a pequeñas empresas y autónomos a superar el aumento de las cargas administrativas y los costes operativos y a ayudar a reintegrarse a los ciudadanos de la UE que abandonaron el Reino Unido a reintegrarse.
La postura de esta Comisión debe ahora ir a pleno en junio para, después, de inmediato, comenzar las conversaciones con el Consejo para llegar a un acuerdo se espera que ese mismo mes, todavía bajo la presidencia portuguesa.