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Cala Gran, el naufragio que dio nombre a una playa de pesca

josé pino

SOMOS MAR

BARCOS.ORG

El Mar de las Traviesas fue llamado así por el cargamento del mercante

13 mar 2021 . Actualizado a las 10:21 h.

El Cala Gran era un mercante de 665 TRB y 1.297 toneladas a máxima carga, botado en Gijón un 27 de noviembre de 1958 por los astilleros Juliana Constructora Gijonesa, con el número de construcción 124 y entregado en julio de 1961 con el nombre de Puerto de Gijón para la Naviera Vasco Gaditana S.A., señal de llamada E.D.G.I. y foliado en Cádiz con el número 250 de la lista 2ª, media 54.60 metros de eslora por 9 metros de manga y 5,35 metros de puntal; equipaba un Smit Bolnes SB-310 construido por la Empresa Nacional Elcano de 1.120 HP que lo impulsa a 12 nudos de velocidad máxima. En 1971, es adquirido por la Naviera Mallorquina y renombrado Cala Gran destinándolo a los fletes del norte.

El 8 de diciembre de 1975 llegó a Coruña con un cargamento de 770 toneladas de sal procedente de Ibiza, consignada a la factoría de Pebsa para sus pesqueros destinados a la pesca del bacalao en Terranova, cargando a continuación 295 toneladas de traviesas de madera de roble con destino al puerto argelino de Bejaia, teniendo que salir hacia Bilbao el miércoles día 10 para completar el alijo hasta las 770 toneladas de traviesas para líneas de ferrocarril.

Tripulación

La forman el capitán Andrés Ons Mártinez de 53 años de Noya, jefe de máquinas Manuel Insua Barreiro de 32 años de Noya, contramaestre Manuel Baña Laranga de 43 años de Noya, segundo mecánico Juan Pérez Martínez de 64 años de Castiñeiras (Ribeira), cocinero Juan Ramón Rubianes Trigo de 19 años de Vilagarcía, marinero Salvador Lista Carril de 17 años de Camariñas y el marinero Salvador Blanco Meirama de 16 años de Coruña.

El caladero de As Travesas, así denominado a día de hoy

En el mismo operativo del domingo 14 de diciembre de 1975 el Ayudante de Marina de Viveiro Sabino Collazo moviliza la flota de arrastreros del puerto de Celeiro, que en ese momento se hallan de arribada forzosa. Solamente dos completan parte de su tripulación; a media mañana el Serra do Xistral al mando de José María Gómez Paleo y el Nuevo Pino Ladra patroneado por Bautista Pino Ladra embocan la ría hacia la zona de aviso del mercante en peligro. El temporal duro apenas les deja rastrear la zona y les ocasiona daños en cubierta barriendo encajonadas y enjaretados. El 7 de junio de 1976 coincidiendo con las Fiestas Patronales de la Virgen del Carmen de Celeiro, el comandante de Marina de Ferrol Antonio Araguas Meira y el gobernador civil de Lugo José Antonio Trillo imponían medallas al Mérito Naval distintivo blanco a los patrones de los dos arrastreros, Che María da Sisa y Tista Pino, a los dos motoristas Manuel Jesús Gómez Paleo y Benigno Pino Ladra y a dos marineros de ambos barcos Manuel Cociña Ladra y Modesto Rivera Martínez.

Durante la temporada siguiente al hundimiento del Cala Gran en la lengüeta de terreno arenoso por oeste del Puntal de San Ciprián que corre del noroeste al sudeste, los arrastreros empezaron a capturar las traviesas de roble que portaba el mercante, por lo que el bautizo de esta playa de pesca fue inminente, «el mar de las traviesas» sigue siendo denominado a día de hoy. El pecio fue encontrado, como no podía ser de otra forma, al tropezar en arrastre una red de un pesquero, y quiso la casualidad que fuese uno de los participantes en el operativo, el Serra do Xistral por la parte de afuera del caladero llamado Engaño o Cuchitril donde antes del naufragio por supuesto no había nada.

A cinco millas de Coelleira

Ahí descansa el Cala Gran a cinco millas y cuarto de la Coelleira, lejos de las tres millas donde les parecía a sus tripulantes que se encontraban en su última llamada de auxilio.

Resultado trágico: cuatro muertos y cuatro desaparecidos

El fuerte temporal que asola las aguas del Cantábrico desde hace dos días, rola con fuerte intensidad al N el domingo 14 de diciembre de 1975 con vientos en torno a los 100 kilómetros por hora y mar muy gruesa, acompañada de chubascos y aparato eléctrico que dificulta la visibilidad y sobre todo la navegación. A las 7.00 hora local la Radio Costera de Almería recibe un SOS del Cala Gran que se halla en graves dificultades a 9 millas al Este de la Estaca de Bares cuando navegaba de Bilbao hacia Argelia. El aviso es cursado a la Costera coruñesa de Eirís que lanza el aviso a todos los buques en alta mar que se hallen en sus proximidades, el ruso Harry Pulitt que se mantiene en contacto con la costera rastrea la zona sin resultado, el petrolero de Campsa Campogrís, el gransolero con destino a la Coruña Siempre Quintanero y otro carguero yugoslavo que no se registra su identidad, se acercan también a la zona pero ninguno logra dar con el mercante balear.

A las 8.00 horas, un nuevo comunicado del Cala Gran alerta de una vía de agua que llega a los camarotes y la gravedad máxima de la situación del barco dando como posición la distancia de tres millas a la isla Coelleira.

A las 9.00 horas despega de Alvedro el helicóptero del SAR mandado por el capitán zaragozano Fernando Fernández y al mismo tiempo salen de Ferrol los remolcadores de puerto Punta Torre, que tienen que volverse en Cabo Prior debido al temporal y continúa hacia la Estaca el RA-1 de la Marina de Guerra.

El helicóptero, ante la nula visibilidad y tras rastrear la zona, vuelve de regreso a las 10.30 de la mañana. El aviso del avistamiento de una balsa del Cala Gran por parte del destacamento de tierra hace que el SAR vuelva a salir pasadas las 11.00 de la mañana y que en este segundo rastreo localice desde el aire los cuerpos sin vida de dos de los náufragos, teniendo que aterrizar en Vicedo para informar y embarcar el celador de zona.

Estos cuerpos serán recuperados al día siguiente tras arrojarlos el mar a las playas de la ría de Cariño. Se trata del segundo mecánico y el contramaestre. El cadáver del capitán sería recuperado al norte de Cedeira por el pesquero Mari Elen días más tarde y el cuerpo del cocinero aparecerá en las playas de Malpica, dos meses después. Cuatro muertos y cuatro desaparecidos será el resultado final del naufragio del Cala Gran.