Patrocinado porPatrocinado por

Salvamento inspecciona la Costa da Morte en busca de los 200 troncos a la deriva

T. L. CARBALLO / LA VOZ

SOMOS MAR

Desde la entidad señalan que lo más probable es que las corrientes hayan alejado los maderos de la costa

12 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Salvamento Marítimo intensifica los trabajos de inspección para dar con los 200 troncos de eucalipto, que desde este fin de semana flotan procedentes del mercante Daroja, un navío de 91 metros de eslora y construido en 1997, que zarpó a las once de la noche del pasado sábado desde el puerto de Ferrol y que se dirigía a Figueira da Foz, en Portugal. El fuerte temporal existente en la zona parece ser la causa de que estos 200 troncos acabaran flotando en el Atlántico.

Debido al riesgo que la madera representa para la flota artesanal que utiliza la Costa da Morte para faenar, desde Salvamento Marítimo se ha ordenado a la tripulación del Helimer 402 que inspeccione toda la franja costera y, de manera especial, el tramo situado a 21 millas al noroeste de Illas Sisargas, en Malpica.

Según confirmaron ayer desde Salvamento Marítimo, hasta el momento no ha habido que lamentar incidencia alguna y tampoco se ha visto ningún tronco a la deriva. «En todo caso, desde la estación de Salvamento Marítimo de Fisterra se ha alertado a la flota para que navegue con precaución y que se alerte al instante de si hay algún peligro para la navegación».

Grandes dimensiones

Los troncos de madera de eucalipto tienen unas dimensiones de entre 5 y 6 metros de longitud y de entre 50 y 60 centímetros de diámetro. En todo caso, desde el ente que vela por la seguridad de la navegación marítima apuntan que lo más probable es que las corrientes hayan alejado los maderos de la costa, con lo que, en principio, no deberían constituir un peligro para los barcos que faenan o transitan por el tramo de litoral que va desde Fisterra hasta Caión, en su mayor parte embarcaciones del cerco y de pesca del día.

No obstante, la incidencia provocada por el Daroja ha puesto en alerta a los barcos de la zona. Son embarcaciones con entre 12 y 14 metros de eslora que podrían irse a pique en el caso de impactar contra uno de estos troncos. Los armadores todavía recuerdan el incidente ocurrido a mediados de enero del pasado año, cuando unos pontones pusieron en serio peligro la navegación en gran parte del litoral de la Costa da Morte.