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La flota gallega araña la salida exprés en Mauritania, pero no la rebaja del canon

E. Abuín LA VOZ

SOMOS MAR

CARMELA QUEIJEIRO

Los marisqueros andaluces podrían recuperar un caladero que perdieron en el 2012

20 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

No, la flota gallega no ha salido demasiado satisfecha de la cuarta ronda de negociaciones para renovar el acuerdo pesquero con Mauritania. Vale que se ha conseguido que los barcos del fresco que faenan en aguas del caladeros africano puedan descargar en terceros países si la frontera por carretera está bloqueada, lo que se conoce como salida exprés. Pero eso es algo que «a estas alturas e despois de todo o que sucedeu o ano pasado non podía ser doutro xeito», dice José Antonio González, presidente de la Orpal (Organización de Palangreros). Y lo dice con la experiencia de haber tenido que destruir un camión cargado de palometa tras más de una semana bloqueado en el paso del Sáhara por una de las variadas protestas que provocaron kilométricas colas tanto para entrar en Mauritania como para abandonar el país.

Al margen de esa salida exprés, que permite un abandono ágil de la zona mauritana en caso de fuerza mayor, la flota no ha conseguido «mellora algunha», a pesar de que, como admite el Ministerio de Agricultura y Pesca en un comunicado, los bloqueos «afectaron muy negativamente a las flotas del fresco».

Y tanto, según González Lijó, «falando de palangreiros, o que menos perdas tivo foron 10.000 euros por mes».

No se ha conseguido la rebaja del canon que deben pagar los armadores que pescan palometa y merluza negra, una medida con la que pretendían mitigar todas las pérdidas de meses y meses de bloqueos intermitentes. Demandaban que en el caso de los palangreros se bajase de 105 a 90 euros, mientras que para los arrastreros que capturan merluza la rebaja que proponían era de 90 a 70 euros.

Como tampoco se ha flexibilizado el cómputo de las capturas accesorias. «O único que queríamos os da palometa era poder descargar unha pouca merluza que nos poda entrar en verán ou en Navidades», dice Lijó. Mientras, los arrastreros pedían que en lugar de computar el by-catch por marea se contabilizase por trimestre -que es el plazo por el que se expide la licencia- o, en su defecto, por mes.

Nueva ronda

Pero nada de eso ha prosperado, aunque el Ministerio de Agricultura y Pesca, todavía no ha tirado la toalla. En su comunicado señala que «continuará solicitando mejoras en las condiciones para las distintas categorías del acuerdo, como el aprovechamiento de capturas accesorias y subproductos, así como rebajas en los cánones para la flota de fresco». Ahora bien, tendrá que ser para el mes que viene. Para el 16 de marzo, fecha para la que se ha fijado la quinta ronda de negociaciones. Será en Bruselas, aunque eso no significa demasiado para la flota gallega, que a veces cree que la UE juega en su contra.

Con la salida exprés, también se ha conseguido arañar a Mauritania la autorización para realizar una campaña experimental de langostino en la zona de pesca que era habitual para la flota marisquera andaluza. Hasta el 2012, en que Nuakchot le cerró las puertas, «haciendo inviable el aprovechamiento de las licencias».