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Armadores presionan para que Mauritania permita una salida exprés del caladero, sin tener que justificar motivo

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

La próxima ronda de negociación, la tercera, se celebrará en Bruselas entre el 16 y el 20 de diciembre

09 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Los armadores gallegos que faenan en aguas de Mauritania no salieron con malas sensaciones de la segunda ronda de contactos para renovar el acuerdo pesquero que este país africano mantiene con la UE. Los afectados -merluceros de fresco y congeladores, palangreros y marisqueros, todos gallegos y andaluces-, se reunieron anteayer por la tarde con los negociadores de la Comisión, a los que trasladaron las cuestiones que se tienen que mejorar en el próximo protocolo.

La siguiente ronda de negociaciones será en Bruselas del 16 al 20 de diciembre Ni que decir tiene que, para la flota que faena al fresco, lo más importante -dejando al margen el importe del canon- es convertir esa medida extraordinaria pactada recientemente entre Bruselas y Nuakchot para salvar los bloqueos que se producen en la frontera, en una salida exprés del caladero. Esto es, que se permita descargar la pesca obtenida en Mauritania en el puerto más cercano de un tercer país -viene siendo el de Dajla- cuando se acredite que hay dificultades para que la mercancía salga del país por carretera.

La vía ahora autorizada no es ágil. Primero debe quedar constancia de que está bloqueada la frontera; si es así, solicitar salir por mar, ir a Nuadibú a recoger al inspector, desplazarse a Dajla, volver a Nuadibú para dejar de nuevo al funcionario y salir a faenar. Lo que intentan los armadores gallegos es poder salir de inmediato cuando sea por causa de fuerza mayor, pero sin tener que justificar el motivo. Sugirieron poner un aval bancario como garantía en el caso de que tengan que descargar en un tercer país, a pesar de que, subrayó María José de Pazo, armadora con palangreros y merluceros en Mauritania, «ningún barco ha cometido ninguna infracción y se respetan todo lo pactado en las medidas técnicas del acuerdo».

Los afectados también se reunieron con el embajador de España en Mauritania, al que solicitaron que trasladase por la vía diplomática al Gobierno de Nuakchot las demandas de la flota española, incidiendo en el gran impacto socioeconómico que esta genera en el país.