Patrocinado porPatrocinado por

Sorprenden a un arrastrero faenando en sábado, sin localizador y en fondo vedado

Alfredo López Penide
lópez penide PONTEVEDRA / LA VOZ

SOMOS MAR

CARMELA QUEIJEIRO

29 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Los buques arrastreros españoles no pueden faenar el fin de semana. Están obligados a amarrar a medianoche del viernes y no pueden salir hasta que pase un minuto del domingo. Eso es lo que dice la legislación vigente. Por eso la tripulación de la patrullera Corvo Mariño, de la Guardia Civil, se extrañó cuando, en torno a las dos de la tarde del sábado, vio una embarcación de arrastre, con base en el puerto de Marín, navegando a escasa velocidad entre las islas Cíes y A Guarda. Quizá si tuviera bandera portuguesa los agentes no se hubiesen sorprendido, porque los arrastreros lusos con licencia para faenar en el Cantábrico pueden trabajar en fin de semana, según su legislación. Pero como llevaba pabellón español y no estaba en puerto, los guardias civiles decidieron indagar qué ocurría. Y con lo primero que se encontraron es con que el barco que no llevaba activo el AIS (Sistema de Identificación Automática), como es obligatorio para las embarcaciones pesqueras de más de 15 metros de eslora.

Así pues, los agentes abordaron el buque y confirmaron que estaba faenando en la modalidad de arrastre de fondo. Tras eso, fue conducido con los aparejos de pesca hasta el puerto de Vigo,

Documentación

Una vez en estas instalaciones, los agentes examinaron la documentación del pesquero y de la tripulación, lo que determinó que se formularan varias denuncias administrativas. La primera infracción ya fue por trabajar fuera del período de autorizado a esa modalidad de pesca, dado que «las embarcaciones deberán cesar su actividad y permanecer en el puerto desde las veinticuatro horas del viernes hasta las veinticuatro horas del domingo».

Otra de las denuncias que se le presentaron fue por faenar en fondo prohibido. Y una tercera, por llevar apagado el AIS.

Además, desde la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra precisaron que le fue incautado el pescado que llevaba a bordo. Eran 320 kilos de distintas especies, que fueron entregados al el Banco de Alimentos de Pontevedra.