Hallan balsas y restos donde se hundió el Dorneda, pero ni rastro del desaparecido
SOMOS MAR
El mal tiempo complica la búsqueda, que realizan la Armada y varios pesqueros
13 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Dos balsas vacías, escombros de todo tipo, pero ni rastro del tripulante desaparecido. La búsqueda del marinero peruano que falta desde que naufragó el pesquero gallego Dorneda, propiedad de la empresa Freiremar, continuó ayer entorpecida por el mal tiempo que impera en la zona, a 308 millas de Comodoro Rivadavia, donde en la madrugada del miércoles hora española (22.00 horas del martes 10 en Argentina) se fue a pique cuando izaba el aparejo a bordo.
El pesquero Farruco, también de Freiremar, ha abandonado la búsqueda y se dirige a Montevideo, según confirmó ayer Emilio Ruiz, gerente de la empresa en Vigo. A bordo de este barco están 16 de los 25 tripulantes rescatados con vida, entre ellos cinco gallegos, y el cadáver del marinero peruano que pudo ser rescatado. Una vez arriben a la capital uruguaya, donde el Dorneda tenía su base operativa, habrá «que hacer los papeles, que llevan tiempo» y después los marineros regresarán a sus hogares. Con todo, no se espera que los gallegos puedan volver a España «hasta mediados de la semana que viene, siempre que todo avance rápido».
Los otros nueve supervivientes que fueron recogidos por el pesquero argentino Beagle I desembarcarán finalmente en Mar del Plata -donde la embarcación tiene su base-, y no en Puerto Madryn, como estaba previsto en un principio. Según los cálculos de la Armada argentina, arribarán a su destino hoy al mediodía (cinco horas más tarde en España). «La tripulación estuvo como loca buscando hasta el último momento al desaparecido», relató Javier Touza, presidente de la Cooperativa de Armadores de Vigo (Arvi). Pero a última hora de la noche el Farruco desistió para poner rumbo a tierra: «[Los supervivientes] están impactados, en shock, porque a 300 millas de la costa, con unas condiciones adversas, de pronto verse en dos balsas, de noche... Es lógico que se produzca una situación de estrés», dijo Touza para explicar el abandono de la búsqueda.
Mala visibilidad
El rastreo continúa pese a las dificultades. Hay varios barcos de la cooperativa viguesa -Touza no pudo precisar cuántos- peinando la zona próxima al lugar que indica la radiobaliza. También el pesquero argentino Navegantes está entre los buques que colaboran activamente, según apuntó Argentina en un comunicado. Y, por supuesto, la Armada que envió a una aeronave para rastrear la zona desde el aire pero tuvo que regresar por baja visibilidad. Y es que en esa parte del hemisferio es pleno invierno y en esas posiciones «suele haber vientos y olas importantes» que, de hecho, están dificultando la búsqueda.
El Dorneda, botado en 1988, fue construido en los astilleros José Valiña de A Coruña. Días antes de iniciar la marea renovó la máquina y acababa de pasar las revisiones en Montevideo.
CC. OO. espolea a la comisión de investigación para aclarar el suceso
CC. OO. lamenta la tragedia del Dorneda, en la que murió un tripulante peruano y otro sigue desaparecido. El sindicato ofrece «todo el apoyo necesario» a los náufragos y a sus familias y conmina a la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciaim), dependiente de Fomento, a abrir rápidamente el proceso para determinar las causas del accidente y arrojar conclusiones para evitar que se repita un siniestro como este, en el que la zozobra de un barco puso en peligro la vida de 27 personas. Y algunas se las cobró.
Información elaborada por Javier Romero, Manu Otero, Marcos Gago y E. Abuín.