Decomisados 80 kilogramos de almeja ilegal a cuatro mariscadores de Poio
SOMOS MAR
En la actividad ilegal para obtener un producto que no cumple con las garantías sanitarias participaban, según las fuerzas de seguridad, tres hombres y una mujer
07 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La Guardia Civil y los vigilantes de la Cofradía de Pescadores de San Telmo, en Pontevedra, decomisaron en la madrugada del pasado viernes 80 kilogramos de almeja después de identificar a cuatro furtivos que faenaban en la playa de Poio, en la zona del Ameixal. En la actividad ilegal para obtener un producto que no cumple con las garantías sanitarias participaban, según las fuerzas de seguridad, tres hombres y una mujer.
Ninguno de los cuatro atendió a los requerimientos de los servicios de vigilancia, y se dieron a la fuga para ocultarse en un monte cercano. En el operativo participaban en ese momento cuatro efectivos de la Guardia Civil de Pontevedra y cinco vigilantes del Servicio de Guardapescas, lo que permitió su rápida localización cuando huían a pie por el monte con los cuatro sacos de almejas.
La incautación
Los sacos contenían 80 kilogramos de bivalvos, de los que 14 eran de tamaño antirreglamentario, inferior a la talla mínima exigida para su extracción, que fueron devueltos en su totalidad al medio marino.
Las cuatro personas identificadas son tres hombres y una mujer, de edades comprendidas entre los 20 y los 33 años, vecinos de Poio y Pontevedra, con numerosos antecedentes por marisqueo furtivo. Fueron denunciados por una infracción administrativa ante los órganos competentes de la Xunta de Galicia.
Por otra parte, también la semana pasada, en el marco de otro operativo conjunto, se localizaron a tres vecinos de Poio extrayendo almeja en la zona de A Seca. En esta ocasión, los furtivos, que también fueron denunciados por vía administrativa, arrojaron las capturas al mar antes de ser identificados.
El furtivismo constituye uno de los principales problemas a los que se enfrenta cada año la Consellería do Mar. Las personas identificadas serán objeto de un expediente sancionador y podrían ser penalizados con multas cuyo importe supera los 1.000 euros.