La flota artesanal gallega denuncia en Bruselas el desmantelamiento del sector
SOMOS MAR
«Nos vienen problemas muy graves para la costa artesanal». La advertencia la lanzó ayer en Bruselas el patrón mayor de Cangas, Javier Costa, tras la reunión que mantuvo el sector, acompañado por la eurodiputada de AGE, Lidia Senra, con altos cargos de la Dirección General de Pesca de la Comisión Europea.
Cuatro años después de la puesta en marcha de la nueva política comunitaria de pesca (PCP), el sector sigue sin poder cuadrar exigencias, prohibiciones y objetivos. Bruselas lo ha dejado sin margen de maniobra combinando cuotas escasas y una impracticable obligación de desembarco para todas las capturas: «Cos descartes haberá barcos que terán que parar. Barcos que terán que despedir xente e barcos despezados. Haberá moitos problemas, chegará un momento no que a pesca artesanal quedará desmantelada», denunció Costa, quien pinta un paisaje dramático para las comunidades del litoral gallego, altamente dependientes de una actividad que da empleo directo a unas 9.000 personas.
A la hora de repartir el pastel, la pesca artesanal siempre sale mal parada respecto a la industrial: «Puxemos enriba da mesa a enorme inxustiza no reparto. Como é posible que á hora de repartir as cotas a frota artesanal, a máis sostible, sexa a máis discriminada?», sostuvo Senra, quien arremetió contra una PCP que «non está pensada nin adaptada» a la realidad de esta actividad. Aunque las denuncias «sorprenderon» a los responsables comunitarios, más proclives a escuchar las demandas de los grandes lobbies pesqueros, Bruselas sigue sin poner en marcha medidas para este segmento de la flota.
Los «stocks» mejoran
Mientras, el comisario de Pesca, Karmenu Vella, celebró los efectos positivos de las restricciones de pesca sobre ciertos stocks. «Hoy, 53 de 76 poblaciones para las que hay datos disponibles se pescan de forma sostenible», anunció en un comunicado. Las cifras contrastan con los 44 stocks del 2017 y los cinco del 2009. Especies como la merluza norte han crecido desde las 32.000 toneladas en el 2006 a las 265.000. A pesar del esfuerzo de la flota, la cuota de capturas en las últimas negociaciones acabó recortándose.