El problema surge cuando los mercantes atracan en el tramo del muelle que la firma tiene para ofrecer este servicio básico
28 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La presencia de barcos mercantes en el muelle del municipio coruñés de Ribeira ha generado un conflicto entre Portos de Galicia y la empresa concesionaria del surtidor de combustible que ofrece servicio a diferentes embarcaciones, como los arrastreros. El problema surge cuando los mercantes atracan en el tramo del muelle que la firma tiene para ofrecer este servicio básico, y que obliga a los arrastreros a ponerse en paralelo pero alejados del surtidor. Los operarios de la estación optaron por pasar la manguera por encima de los mercantes para facilitar el gasoil, algo que genera inseguridad por el riesgo de incendio y, además, dicen en Portos de Galicia, puede provocar vertidos contaminantes en la dársena.
En la empresa concesionaria aseguraban ayer que son los mismos responsables del ente autonómico los que autorizan a los mercantes el atraque en la zona que tienen reservada. «Nos dejan pocas opciones para hacer nuestro trabajo al prohibirnos pasar la manguera por encima», explica un operario, que afirmaba que ayer mismo Portos de Galicia les entregó un escrito en el que se prohíbe seguir utilizando ese método por el riesgo que existe de inseguridad y contaminación.
Búsqueda de alternativas
Un portavoz de este departamento autonómico, dependiente de la Consellería do Mar, señalaba ayer que los mercantes pueden atracar en esa zona del muelle aunque esté la gasolinera, y añadía que la compañía concesionaria tendrá que buscar alternativas: «Ellos verán cómo lo hacen, pero pueden valerse de un camión cisterna u otras opciones, pero nunca pasando la manguera por encima del barco que atraque al lado del muelle».
Las indicaciones remitidas por Portos, a través de un escrito oficial, estaban siendo analizadas ayer por sus responsables en Portugal, aunque parece claro que el requerimiento de la Xunta no ha gustado, ya que alerta del riesgo de sanciones en el caso de mantener esa forma de actuar.
Un portavoz de esta misma empresa añadía ayer que tendrán que adaptarse a las exigencias del Gobierno gallego, y buscarán alternativas como el uso de camiones cisterna. Aún así, entienden como un sinsentido que sea Portos el que autoriza el atraque de los mercantes y que, a la vez, dificulte su trabajo obligándolos a recurrir a sistemas de trabajo que hasta ahora no han sido necesarios ni requeridos.