
Para responder a ese cambio de tendencia, los agricultores gallegos van ampliando cada vez más la superficie dedicada a cultivos como el kiwi o tratan de introducir otros como el aguacate
26 may 2023 . Actualizado a las 10:04 h.El consumidor manda en el campo. Y mucho. Los productores han de adaptarse a sus demandas para hacer rentables sus explotaciones. Para guiarse han de echar mano de informes como el elaborado por el Observatorio Nestlé de Hábitos Nutricionales y Estilo de Vida de las Familias hecho público ayer donde se confirma, por ejemplo, que las frutas han dado el sorpasso en el desayuno a las galletas o la bollería. Y una de las alternativas que está ganando más terreno a esos alimentos de producción industrial, por ejemplo, son los boles de yogur con cereales o las tostadas con aguacate.
Lo que dicen los datos recabados en ese documento es que un 34% de los españoles continúan desayunando una tostada con café, leche o bebidas alternativas a la leche. Pero la fruta ha pasado de ser consumida en la primera comida del día por tan solo un 7% de consumidores durante la primera comida del día a que ahora lo hagan un 20%. «Este es el porcentaje que _como dicen desde Nestlé_ antaño solían obtener las galletas y la bollería que ocupaban el segundo y tercer puesto, respectivamente, en el ránking de desayunos habituales de los españoles y por las que hoy solo se decanta el 14 %».

Este cambio de tendencia entre los consumidores comienza a verse reflejado en el campo. Para muestra el incremento de superficie dedicada en Galicia al cultivo de kiwis, una fruta muy consumida a primera hora de la mañana. Según los datos del Ministerio de Agricultura, el año pasado la superficie dedicada al cultivo de esta fruta era de 877 hectáreas, de las que 850 estaban en producción y la cosecha ascendió a 18.269 toneladas de fruta, el 66% de toda la producción española. Y justo un año antes, en Galicia se dedicaban al cultivo de esta fruta tres hectáreas menos (de ellas, las 845 hectáreas que andaban en producción sacaron una cosecha de 17.835 toneladas).
La incorporación del aguacate en la dieta también se ve reflejada en el campo gallego, aunque de momento y pese a que esta es una fruta cuyo cultivo requiere un elevado porcentaje de agua su presencia es tímida. Los datos del Ministerio de Agricultura muestran como el año pasado la superficie dedicada a esta fruta tropical era de ocho hectáreas (solo tres estaban en producción), pero eran cinco más que justo un año antes.
La evolución de la presencia de kiwis o aguacates en el campo gallego es una prueba de cómo los agricultores miran cada vez más a las tendencias que marca el mercado a la hora de dedicidirse por un cultivo u otro. La idea es tratar de acercar los cultivos al lugar donde se consumen, pero la capacidad para poder hacerlo también depende del clima y de las características del suelo. Porque no todas las frutas se dan en todas partes, ni tienen la misma rentablidad.