«Con el agua que reciclamos de la depuradora podrían regarse más de mil plantas de tomate al día»

M.C. REDACCIÓN / LA VOZ

SOSTENIBILIDAD

Cristina Martínez García es la responsable del Área ECO BIO Tecnologias del CETIM
Cristina Martínez García es la responsable del Área ECO BIO Tecnologias del CETIM

Investigadores del centro tecnológico CETIM, ubicado en Culleredo, han logrado limpiar para su uso en agricultura 2.150 litros de agua diarios de la EDAR municipal de Ferrol en el marco de la investigación LIFE Green Sewer

29 dic 2023 . Actualizado a las 22:42 h.

Reciclar el agua de las depuradoras como una fórmula para evitar o rebajar el desperdicio de un recurso cada vez más cotizado es una de las fórmulas que barajan los ingenieros a la hora de aplicar medidas de ahorro en los ayuntamientos. Eso es lo que investiga precisamente el proyecto LIFE Green Sewer en la estación depuradora de Ferrol, una iniciativa cofinanciada con fondos europeos y liderada por el Centro Tecnológico CETIM de Culleredo con la colaboración de EMAFESA, la Universidad de Barcelona, Magtel, Socamex. Aunque todavía es un proyecto piloto, han logrado algunos avances. La responsable del Área ECO BIO Tecnologías del CETIM, Cristina Martínez García, dice que con el volumen de agua que han logrado recuperar cada día hasta ahora «se podrían regar 1.079 plantas de tomate, teniendo en cuenta que cada una de ellas necesita unos dos litros de agua al día».

Lo que han hecho es instalar en la planta de tratamiento de aguas residuales (EDAR) de cabo Prioriño, en Ferrol, un contenedor con capacidad para 12 metros cúbicos de agua diarios, «aunque solo se actúa sobre 2,6 metros cúbicos al día». Al agua que llega a ese contenedor desde las cañerías de Ferrol se le aplica un tratamiento de depuración alternativo: «Lo normal en las depuradoras es que al agua se le aplique un tratamiento primario, un tratamiento secundario y también hay algunas en las que tienen un tratamiento terciario. Con esta tecnología lo que se hace es sustituir el tratamiento secundario por un tratamiento alternativo que usa tecnología de membranas», explica Martínez. Las tecnologías de membranas son filtros con poros de distinto tamaño que te permiten separar del agua aquello que no nos interesa en lo que se llama corriente de rechazo y dejar pasar lo que sí nos interesa como el agua con calidad para reutilización.

«Con esta tecnología puede recuperarse el agua, pero también nutrientes presentes en el agua como nitrógeno, fósforo o potasio, que contribuyen a mejorar el suelo», explica esta investigadora, al tiempo que indica que ya han logrado reciclar el 83 % del agua que llega.

Para poder aplicar este método, explica además, habría que sustituir el tratamiento secundario por esta nueva tecnología. La ventaja, junto con el hecho de que lograría recuperar el agua y hacerla apta para su uso en agricultura en caso de cumplir con los estándares establecidos, es el poco espacio que ocupa. 

En estos momentos, ya se ha validado la planta piloto durante 10 meses y se va a trasladar a Almendralejo para comprobar que se puede usar en aguas con características diferentes.