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La UE busca aldeas que quieran convertirse en «startup villages»

M.C. REDACCIÓN

SOSTENIBILIDAD

De momento, solo tres poblaciones ubicadas en Irlanda, Austria y Croacia están identificadas como tal

14 mar 2023 . Actualizado a las 09:57 h.

Las áreas rurales representan más del 80 % del territorio de la UE, unos espacios donde viven  unos 140 millones de personas que son en torno al 30% de la población total de los países que conforman el marco europeo. En Galicia, por ejemplo, en 37 de los 313 concellos en los que está repartido el territorio hay menos de 1.000 habitantes. Desde hace años el gran desafío de las autoridades europeas, estatales y autonómicas es hallar una fórmula capaz de enfrentar el problema de la galopante pérdida de población en esas zonas, un fenómeno que trae de la mano pérdida de servicios u obstáculos a la repoblación como son la gran preocupación por la pérdida de oportunidades de empleo, disminución de ingresos, acceso al transporte o una buena conectividad.

La última estrategia de la UE para crear valor a largo plazo en esas áreas está basada en el uso de la innovación para dar una nueva oportunidad a esas áreas rurales. De ahí que en febrero pasado la Comisión Europea lanzó una convocatoria continua de manifestaciones de interés para todos aquellos pueblos europeos que pretendan ser Startup Villages. De momento hay tres candidatas: Killorglin, una ciudad de 2.199 habitantes en el condado de Kerry (Irlanda); Kitzbühel, una ciudad de tamaño medio de Austria; y centro de Istria, en Croacia. Pero el mapa continuará ampliándose a medida que vayan aceptándose nuevas candidaturas. La encuesta para optar a ella está en este enlace.

Una Startup Village, según la UE, no es más que un lugar o red de pequeños lugares que adoptan la innovación y la ambición empresarial «como una forma de desbloquear el potencial de desarrollo y apoyar el bienestar en las zonas rurales. Porque al  combinar el lugar, la gente y los propósitos locales con conocimientos, recursos y mercados, esta población se esfuerza por proporcionar condiciones favorables para emprendedores y también ecosistemas innovadores para prosperar». 

De ahí que las preguntas que hayan de hacerse los candidatos para saber en qué grado cumplen los baremos mínimos son variadas. Más allá de que el pueblo cuente con administraciones que estén implicadas con el desarrollo de la innovación o el fomento del despegue empresarial, a nivel de recursos habrá que ver en qué medida cuenta con una infraestructura adecuada para los negocios _incubadoras o espacios de trabajo conjunto, por ejemplo_, tiene atractivo para vivir o trabajar o en qué grado los recursos locales pueden ayudar a crear nuevas oportunidades. También hay que tener en cuenta el acceso a la financiación de los empresarios locales o la existencia de talento en el pueblo o potencial para atraerlo. Otro punto importante es ver en qué medida puede el pueblo acceder e intercambiar conocimientos de redes y organizaciones locales y externas como organizaciones de investigación o educación superior, centros de transferencia de tecnología y proveedores de servicios. También resulta importante ver cómo los empresarios van a poder luego acceder a la demanda de mercados externos o, en caso de haber barreras en este sentido, como poder superarlas.