Patrocinado porPatrocinado por

Seaga volverá a encargarse de la retirada de los nidos de velutina

La Voz

SOSTENIBILIDAD

Restos del avispero y larvas de velutina una vez concluida la intervención realizada en O Pino
Restos del avispero y larvas de velutina una vez concluida la intervención realizada en O Pino VÍTOR MEJUTO

El Consello da Xunta aprueba la renovación del encargo a la empresa pública para que desarrolle el plan de vigilancia y control de esta especie

17 feb 2022 . Actualizado a las 20:44 h.

Por tercer año consecutivo, la empresa pública Seaga se encargará de la retirada y la destrucción de nidos de velutina dentro del programa de vigilancia y control de esta especie impulsado por la Xunta y la Federación Galega de Municipios e Provincias, a la que se sumó ya el 98 % de los concellos gallegos. El Consello da Xunta dio este jueves el visto bueno a la renovación de ese encargo a Seaga.

Según ese acuerdo, los equipos de la empresa pública se encargan de neutralizar, retirar y eliminar los nidos de velutina en un plazo máximo de cinco días hábiles desde que los ciudadanos avisan de su presencia mediante una llamada al número de teléfono habilitado para este fin, el 012. Ese plazo marcado debe respetarse salvo cuando el nido esté situado a gran altura o en lugares de difícil acceso que hagan necesario actuar con otros métodos.

La empresa cuenta con un equipo de coordinación que se encarga de organizar los dispositivos de intervención. Estos cuentan con material y medios necesarios para la realización de estos trabajos, tanto pértigas como escopetas, insecticidas, equipos de protección individual, transporte y material informático. 

En el año 2021 estuvieron adheridos al programa 300 concellos, en los que Seaga retiró casi 18.000 nidos: 6.417 en la provincia de A Coruña, 2.166 en la de Lugo, 1.699 en Ourense y 7.575 en Pontevedra. 

Ochenta personas trabajaron en el programa, y durante el año sus equipos se mejoraron con la adquisición de marcadoras de aire comprimido de gran alcance, pértigas de fibra de carbono más ligeras y bombas de batería para impulsar los biocidas y facilitar el trabajo de neutralización de los nidos.