La diversificación no cuaja en las granjas gallegas, donde solo un 1,5% lo hacen

m. cedrón REDACCIÓN / LA VOZ

GANADERÍA

PEPA LOSADA

Antonio tomó esa ruta hace 30 años y tiene desde vacas a un vivero forestal

19 sep 2023 . Actualizado a las 19:08 h.

Cuando Antonio Expósito tomó las riendas de la explotación que sus padres tenían en la parroquia de As Oiras, en el concello lucense de Alfoz, se dio cuenta de que con quince vacas dedicadas a la producción de leche, a medio plazo, su granja no sería viable económicamente. Eran los primeros años de la década de los noventa, cuando en Galicia convivían unas 66.000 explotaciones dedicadas a la producción láctea que, con una media de una decena de nodrizas por granja, no podían sobrepasar los 1,6 millones de toneladas de producción de leche que les marcaba la cuota láctea correspondiente a la comunidad. «Con quince vacas de leite e tendo a granxa nun lugar con tanta pendente aquilo non era viable», explica ahora. Otras explotaciones en una situación semejante optaron por crecer en volumen. Él por la diversificación.

Fue un pionero al abrir un camino que incluso ahora, treinta años después, cuesta emprender. Porque, según la encuesta sobre la estructura de las explotaciones agrícolas elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el número de granjas que en Galicia tenían en agosto del pasado año una actividad complementaria de la explotación era de 1.196, poco más de un 1,5 % de las existentes en la comunidad. Y lo que hace la mayor parte (498) es transformar las materias primas que producen. Bien es cierto que, como explica director de la Fundación Juana de Vega, José Manuel Andrade, hay algunas explotaciones intensivas de vacuno de leche que también hacen producción integrada de cerdo o pollo, «ao operaren con sociedades diferentes, esta diversificación de actividade non se reflicte nas estatísticas, e isto non quere dicir que non se faga».

Lo que hizo Antonio fue abrir el abanico de especies ganaderas, apostar por la economía circular antes de que tuviera nombre y poner una pica en el sector forestal. Lo hizo dando un giro a una explotación que como tantas otras fue protagonista de la reconversión del sector en Galicia allá por la década de los noventa. Dejó la leche y se centró en la carne. Pero además, aprovechando que su explotación está en A Mariña, un lugar en el que ya existía en aquel momento una gran tradición forestal, abrió un vivero de planta de eucalipto y pino.

De los conejos al humus

Luego llegaron los conejos, las ovejas y las cabras de razas autóctonas gallegas. También incorporó cachenas a su rebaño de vacas de Ternera Gallega Suprema y con el estiércol de los conejos abona los campos y hace humus de lombriz que comercializa a una empresa portuguesa. «Agora temos animais de Ternera Gallega e cachena. Estes últimos vendémolos máis para particulares porque son máis pequenos. As ovellas e as cabras axúdannos a limpar o monte, dos coellos aproveitamos o esterco... unha cousa vaise complementando coa outra», explica este emprendedor que pilota la granja Explotacións Gandeiras Soli junto a su mujer y su hija que, tras estudiar ingeniería agrícola, también echa una mano. Y no faltan los mastines o los ponis rondando por la explotación. «Tamén temos unha obreira», apunta este ganadero.

Él es un experto en emprender. Pero dice que no hay una fórmula estándar a la hora de combinar distintas actividades en una misma explotación. Avalado por tres décadas de trabajo dedicado a saber poner los huevos en distintas cestas, explica que «cada granxa ten que ver as circunstancias ás que se enfronta porque non é igual ter 100 hectáreas de prados nas que podes dedicar todo a vacas que ter parte da superficie de monte. Hai que ir combinando cousas que se complementen unhas coas outras».

Lo que no hay que perder de vista es que en el sector primario cualquier pequeño movimiento a nivel climático o normativo puede variar los cálculos. Y dedicar todos los esfuerzos hacia una única producción es, a veces, un riesgo. Los inesperados cambios de tendencia los ha percibido este productor en su vivero este año: «Normalmente sae máis planta de eucalipto que de pino, pero curiosamente este ano saiu moito pino, tanto como esa especie de Australia. Houbo moita falta de pino», dice.

Lo que está claro es que en un contexto de alta volatilidad de precios de materias primas tanto en el mercado global como en las granjas, la diversificación de la actividad se ha convertido en una de las principales vías para mantener a flote las explotaciones ganaderas.

En este sentido, José Manuel Andrade, apunta que «a diversificación da actividade das explotacións que responde ao concepto de granxas multifuncionais máis estendido en Europa, ten máis sentido aquí nas explotacións familiares para diversificar risco e aumentar a resiliencia das mesmas».

Está claro que en Galicia el modelo de granja multifuncional no cuaja al mismo ritmo que en Europa: «A evolución das nosas gandarías, sobre todo as de vacún de leite, derivou cara unha elevada especialización que fai que os gandeiros se dediquen ao que saben facer, e fano moi ben. Calquera outra actividade supón distraerse da principal, asumir novos riscos e incertezas», dice Andrade. Pero el no saber dónde poder asesorarse sobre esto tampoco ayuda.

El desconocimiento de los mercados o la falta de trabajadores frenan dar el paso

Son muchas las razones que pueden estar detrás de estas bajas cifras de diversificación en las granjas gallegas. Desde la Fundación Juana de Vega dan algunas pistas sobre lo que podría influir en ese conservadurismo a la hora de abrirse a nuevas iniciativas. José Manuel Andrade habla, por ejemplo, de la «falta dunha metodoloxía e dunha análise reflexiva para determinar novas actividades, viables e rendibles, que impliquen unha diversificación da actividade na que se especializaron as granxas».

Pero no menos importantes son el desconocimiento de nuevos mercados a los que dirigir sus productos y el complicado acceso a los canales de comercialización. Por no hablar de los problemas derivados de las dificultades para encontrar mano de obra en el sector primario.

Además muchos titulares de explotaciones desconocen a dónde deben acudir para obtener asesoramiento especializado para diversificar la actividad.