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Galicia, el país que promociona poco «o Vega Sicilia das carnes»

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS LUGO / LA VOZ

GANADERÍA

El ganado vacuno de carne está presente de manera especial en comarcas de Lugo.
El ganado vacuno de carne está presente de manera especial en comarcas de Lugo. ALBERTO LÓPEZ

Ternera Gallega vende fuera de la comunidad menos de la mitad de su producción

28 jul 2023 . Actualizado a las 12:45 h.

La carne de vacuno gallega posee una calidad que los expertos en particular y los consumidores en general sitúan entre las más apreciadas del mundo. Lo que supone un reconocimiento de la calidad de la ganadería de Galicia se encuentra, sin embargo, con el contrapunto de la falta de presencia en mercados de fuera de la comunidad, donde el precio podría ser mayor.

«É o Vega Sicilia da carne, e hai que pagala». Así se expresó este jueves Xosé Ramón González, responsable de Producións Ecolóxicas e Extensivas de Unións Agrarias y miembro del consello regulador de la IXP Carne de Vacún de Galicia. El fomento de la exportación es una medida que defiende la organización: introducir la carne en otros circuitos de venta podría permitir un aumento del precio y abrir vías fuera de Galicia, en donde el mercado, dijo, empieza a dar muestras de estancamiento.

Lo que ocurre en el sector vinícola, con denominaciones de origen cuyo mercado también está presente fuera de la comunidad, es un modelo que se considera digno de seguir. Para ello, como recalcó González, se necesitan campañas de promoción en las que la Xunta debe asumir un papel protagonista. En este caso, explicó, el órgano rector de la mencionada IXP no puede actuar con la soltura de otros consellos reguladores debido a que su capacidad de maniobra resulta limitada: el presupuesto anual para publicidad se sitúa en torno a los 400.000 euros.

La comercialización de Ternera Gallega Suprema se concentra en gran parte en Galicia. Lo que se vende fuera de la comunidad no llega a la mitad del total (un 45 %): el mercado gallego concentra el 55 % de las ventas, en el resto de España se distribuye el 42 % y la exportación ocupa por ahora una cuota meramente testimonial (3 %).

La situación tiene reflejo en diversas comarcas de Galicia, pero de manera especial en Lugo: las explotaciones de Ternera Gallega Suprema son casi 8.500 y alrededor de la mitad están en la provincia, como recordó González ayer. Por otro lado, la necesidad de la intervención de la Xunta en la promoción es más evidente, para Unións Agrarias, por la situación de la distribución: según los datos de González, en cinco empresas se concentra el 90 % del volumen total. «Ten que haber unha rede de distribución que chegue a toda España», dijo, porque se corre el riesgo de caer en un «problema estrutural» por la situación del mercado.

Mientras tanto, el aumento de precios que solía darse a estas alturas del año parece moverse con retraso en este 2023. Algún ganadero que vendió becerros hace pocas semanas comentó ayer que había cobrado seis euros por kilo/ canal, lo que supone el mismo precio que hace unos meses. El verano es un período de incremento de precios, ya que la llegada de turistas y la celebración de fiestas y de banquetes propician un aumento del consumo de carne. Sin embargo, González insistió en la necesidad de buscar mercados fuera de Galicia para superar esa dependencia.

Función social

Garantizar la viabilidad de las explotaciones tiene su importancia por razones económicas pero también sociales y ambientales. Félix Porto, secretario de Coordinación Externa, recordó que las explotaciones de ganado vacuno de carne son básicas para fijar población en municipios rurales, en donde su existencia contribuye a fijar población. A ese papel se añade su importancia en la prevención de incendios, dado que las reses se mueven en un sistema de pastoreo.

Frente a esa importancia, criticó las condiciones económicas en que se mueven últimamente los ganaderos, afectados por la subida de los costes de producción (gasoil y fertilizantes, entre otros). Por ello criticó a la Xunta, a la que pidió medidas en la misma línea que las del Gobierno central: si Madrid concedió ayudas al sector (85 euros por cabeza más otros 48 por res para paliar las consecuencias de la sequía), la Consellería de Medio Rural debe usar, dijo Porto, sus competencias y su presupuesto para ello.

Un año marcado por las protestas del sector y por manifestaciones

Las protestas se sucedieron en Lugo en meses pasados debido a la situación del sector. Convocados por la Asociación Galega de Gandeiros da Suprema, productores de carne se manifestaron en Lugo, trayendo incluso tractores y vacas, para denunciar el bajo precio que cobraban. Explicaron reiteradamente que percibían menos de cinco euros por kilo, lo que no solo suponía una cifra similar a la de décadas pasadas sino inferior a la de los costes de producción, afectados por la subida del combustible o del pienso. Además de las manifestaciones, hubo ganaderos que se desplazaron durante días a Lugo para mantener concentraciones simbólicas ante el edificio de la Xunta y ante la Subdelegación del Gobierno.