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Más ventilación y menos humedad: la fórmula para mejorar el bienestar de los lechones

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS LUGO / LA VOZ

GANADERÍA

Investigadores del campus de Lugo recalcan que el bienestar animal es cada vez mayor en la ganadería porcina.
Investigadores del campus de Lugo recalcan que el bienestar animal es cada vez mayor en la ganadería porcina. Cedida

Investigadores del campus de Lugo asesoran a explotaciones sobre el manejo de los animales

22 may 2023 . Actualizado a las 09:42 h.

Más ventilación y menos humedad. Es la fórmula que recomiendan investigadores de la Escola Politécnica Superior del campus de Lugo (USC) para tener unas idóneas condiciones de bienestar de los lechones en las explotaciones. Un equipo del Campus Terra trabaja desde hace años en este apartado de la ganadería, en contacto con responsables de instalaciones situadas en varios puntos de Galicia.

Los trabajos tienen en cuenta las condiciones en que deben estar los animales en las primeras semanas de vida, hasta llegar a los veinte kilogramos de peso. En esas semanas la temperatura puede llegar a los 30 grados, que por lo general se alcanza por sistemas de calefacción convencional, de gasoil. Hay también otros sistemas (energía solar, por ejemplo), aunque por ahora se usan como fuentes complementarias.

Dolores Fernández, profesora del Departamento de Enxeñaría Agroforestal de la USC, destaca que el equilibrio entre ventilación y humedad es la clave de esas condiciones, que también pueden generar un ahorro económico en las granjas. La consecución de unas idóneas condiciones puede llegar a suponer una disminución que se sitúa entre el 33 % y el 47 % por kilo de animal criado. La citada profesora parte de una premisa: calentar aire húmedo es más caro que calentar aire seco. Esa es la razón por la que conviene vigilar la humedad, ya que así se logra que el aire se caliente con más facilidad y el bienestar animal, objetivo básico de las medidas, está igualmente presente.

Por otro lado, apunta la profesora, en los últimos tiempos se está extendiendo el sistema de calefacción por suelo, en el que el aumento de temperatura se logra con agua caliente. Con el modelo se logra unan unas condiciones similares a las que tienen los lechones al poco de nacer, cuando están todavía con sus madres. Así pasan unas seis semanas, en las que la temperatura va bajando poco a poco: de los aproximadamente 30 grados del principio se pasa a unos 20 al final. Esa reducción de la temperatura se logra a medida que los animales van cogiendo peso

Tesis doctoral

Cuestiones como las explicadas por Dolores Rodríguez están presentes en una tesis defendida recientemente en el Campus Terra. Su autor, Eugenio Losada, tuvo en cuenta esas ideas para afirmar que las estrategias de bajo coste se pueden introducir en explotaciones para conseguir un mejor rendimiento con menos gasto. También la profesora de la Escola Politécnica Superior subraya que son aspectos totalmente viables, sin olvidar que también, de una manera cada vez mayor, se introducen conceptos de eficiencia energética.

«O que se tenta é combinar o benestar animal coa mellor enerxética», recalca Rodríguez. Lo que sí resulta particularmente conveniente es extremar la precaución y conseguir las mejores condiciones en las dos primeras semanas de vida de los lechones: en ese tiempo no solo son separados de sus madres sino que también cambian de alimentación y de compañía, por lo que sus niveles de estrés suelen ser altos.

Contacto con granjas

El grupo de investigación al que pertenece Rodríguez lleva años trabajando en este proyecto. Esa experiencia le vale para recalcar que los niveles de bienestar han mejorado en las explotaciones y que el bienestar animal es un concepto plenamente asumido por los criadores. Sus palabras están avaladas por un conocimiento sobre el terreno, ya que están en contacto con responsables de explotaciones de toda Galicia, que en algunos casos han proporcionado datos frecuentes durante dos años.