Patrocinado porPatrocinado por

Un vehículo pensado para cerrar el círculo y que, además, apenas contamina

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

GANADERÍA

Miguel souto

El nuevo tractor de metano de New Holland está pensado para explotaciones que tengan una planta de biogás

04 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Las innovaciones en maquinaria agrícola no solo están pensadas para facilitar la tarea de los agricultores. Otra de las ventajas de todas estas nuevas máquinas es que contaminan mucho menos que sus predecesoras. Aunque pocas pueden presumir de emitir tan pocos gases de efecto invernadero a la atmósfera como el New Holland T6 alimentado por metano, que presentó Fariña Maquinaria y que se llevó otro de los premios del certamen que se celebra en Silleda. Sus promotores reconocen que esta es una máquina que no está al alcance de todos los públicos, por ahora. No por su precio, que es solo ligeramente más elevado que el de otros tractores similares, pero sí porque apenas existen hasta el momento, lugares en los que repostar los combustibles que utiliza para moverse.

Lo primero que destacan en esta firma de tractores es que esta una máquina pensada para la economía circular. «Está pensada para clientes de grandes ganaderías de vacas o cerdos que produzcan biometano y puedan utilizar este para el tractor», cuenta Carlos Luca, delegado comercial New Holland para el norte de España. Si una explotación cuenta con una planta de biogás, generado a partir de los purines que en ella se recogen, puede utilizar lo que de ella sale para abastecer al tractor, aplicando así a rajatabla el principio de la economía circular. Es por ello que esta máquina está, por ahora, pensada «para clientes muy especiales», asegura Luca.

El nuevo tractor lleva un motor tipo gasolina con dos inyectores por cilindro e ignición por bujía y consume biometano o gas natural comprimido o licuado, con lo cual podría abastecerse también en una gasinera. Su funcionamiento y su autonomía son similares a los que se mueven por gasoil. «Tiene una autonomía de entre siete y ocho horas, frente a las once que dura un diésel», explica Luca, quien insiste en que apenas se notan diferencias entre la potencia y la conducción, salvo el sonido del motor, que recuerda más a los de gasolina. De hecho, se ha probado ya en bodegas y en limpieza de playas con mucho éxito. Su precio es también más elevado, entre un 15 y un 20 % con respecto a una máquina convencional.

Pero la gran ventaja de esta máquina es que, además de que podría aprovechar un combustible generado a partir de residuos, apenas contamina el entorno, sus emisiones son hasta un 20 % inferiores a las diésel de última generación.