El consello de la Xunta declaró la semana pasada de utilidad pública las de Santa María de Almoite (Baños de Molgas), Santa María de Bemil (Caldas de Reis) y la de Santiago de Moncelos (Abadín)
21 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Las concentraciones parcelarías continúan. La Consellería do Medio Rural ya había dicho que por cada una de las que fuera entregando los títulos daría comienzo a nuevos procesos de concentración para facilitar, entre otras cosas, superficie suficiente a las explotaciones para cultivar sus propios forrajes o cereales, reduciendo costes de producción. Al mismo tiempo pretende hacer frente al fuego y asentar población en el rural al hacer rentables las empresas o explotaciones. La semana pasada tocó el turno a las de Santa María de Almoite (Baños de Molgas), Santa María de Bemil (Caldas de Reis) y Santiago de Moncelos (Abadín), después de que el Consello de la Xunta las declarara de utilidad pública. En conjunto, estos tres procesos reestructuraron un total de 2.333 hectáreas que se reparten entre más de 3.000 propietarios.
Estos tres procesos, como avanzan desde Medio Rural, se declaran mediante la Lei de Mellora da Estructura Territorial Agraria de Galicia (Metaga), que precisamente tiene por objetivo aumentar la base territorial de las granjas. De hecho, los tres procesos declarados de interés público fueron demandados por los titulares de explotaciones ubicadas en esos tres concellos. Los Gobierno locales también las respaldaron. En el caso de la parroquia de Baños de Molgas, hay un total de 21 explotaciones; en el de Caldas de Reis, 62, mientras que en Abadín son 29. De ahí, como añaden desde la consellería, la necesidad de reorganizar «o territorio para mellorar as condicións estruturais, técnicas e económicas das explotacións agrarias da zona».
Junto a estos procesos, el año pasado fueron decretadas otras 5 concentraciones parcelarias: la de la zona de Arcos-Sobrada de Aguiar-San Lourenzo de Aguiar y la de la zona de San Fiz de Paz, en Outeiro de Rei; la de San Xulián de Poulo, en Ordes; la de San Xoán de Seoane de Pregación, en Friol; y la de Viladonga, en Castro de Rei. Estas fueron las primeras en ser decretadas desde la entrada en vigor de la Metaga.
Durante este año, la Xunta prevé decretar otra veintena de procesos. De ahí que de esa forma entre los años 2021 y 2022 se decretarán 28 nuevas reestructuraciones, que abarcan un total de 23.613 hectáreas y 107.655 parcelas de 15.586 titulares. Entre el 2020 y lo que va del 2022, la Xunta «rematou un total de 22 concentracións parcelarias, que abarcaron unha superficie de case 16.000 hectáreas, beneficiando a máis de 10.100 propietarios que recibiron arredor de 23.300 títulos».
Desde Medio Rural explican: «As concentracións parcelarias son unha ferramenta fundamental para paliar o minifundismo presente na nosa comunidade, dende o punto de vista da estrutura da propiedade». POr eso han invertido en los distintos procesos de reestructuracuón más de 118 millones de euros desde el 2009, mientras que para este año el presupuesto previsto es de 12 millones de euros. De ahí que, como añaden, «a Xunta seguirá impulsando estes procesos da man da Lei de recuperación da terra agraria de Galicia, que veu complementar e desenvolver o marco legal actual, para culminar un camiño iniciado pola Lei da mellora da estrutura territorial agraria de Galicia (Metaga). Así, na nova lei apóstase ademais por mecanismos de mobilización voluntarios que permitan unha maior participación dos interesados na explotación das terras, como son os polígonos agroforestais, as agrupacións de xestión conxunta da terra, as aldeas modelo ou as permutas de especial interese agrario, entre outras. Desta forma, estase a mellorar a estrutura territorial das explotacións agrogandeiras e forestais galegas, favorecendo a súa rendibilidade».