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La carne de pollo sube en el súper, pero no en el campo

m. cedrón REDACCIÓN

GANADERÍA

FAZRY ISMAIL | EFE

Los productores piden nueve céntimos más por kilo para poder aguantar la tormenta y no cerrar. la industria dice que sus «costes de producción subieron un  40% desde enero del 2021, pero el  incremento de precio al público consumidor solo ha sido del 15%»

22 jun 2022 . Actualizado a las 20:33 h.

Los productores de pavo y pollo llevan muchos meses haciendo cuentas. Y no les dan. Dicen que mientras el precio del pollo en los supermercados ha pasado de los 2,75 euros a los 3,25 euros, ellos continúan percibiendo por la cría de esas aves prácticamente lo mismo. Solo alguna integradora ha actualizado los contratos, lo que según calculan algunos productores sale a entre uno y dos céntimos por kilo de pollo. Pero, como dice, eso no les llega. Por eso, piden a las Administraciones una solución para poder continuar. De lo contrario se verán abocados a cerrar, lo que implicaría, como advirtió hace unos días la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), un probable desabastecimiento de carne de pollo en otoño. Lo mismo han puesto de manifiesto desde Unións Agrarias

«Criar un pollo nos cuesta entre 49 y 50 céntimos, unos 17 céntimos más que hace un año. Y según el contrato que tengo con la empresa integradora a la que le crío los pollos, me pagan por esas labores entre 40 y 42 céntimos por ave. Tendríamos que cobrar entre 9 y 10 céntimos más para poder cubrir la subida de costes que estamos viviendo desde hace meses». Lo que cuenta Alexis Codesal, productor de pollo de la provincia de León y uno de los promotores de Defiende tu Avicultura, una asociación que engloba a un total de 435 explotaciones avícolas de toda la Península que crían unos 26 millones de pollos y pavos al año (un 25 % de toda la cabaña nacional), es una realidad común para la gran mayoría de las granjas de cría de estas aves para una empresa integradora. Eso quiere decir que ellos se encargan de «la cría y custodia» de unos animales que son propiedad de la empresa que, una vez engordados, se encarga de llevar al matadero y comercializar: «La integradora nos da el pienso, pone los servicios veterinarios y los animales; nosotros ponemos las instalaciones, adoptamos las medidas higiénicas pertinentes, mantenemos la temperatura en las granjas según marca la normativa» El problema es que la electricidad, la viruta para las camas, el propano para mantener la temperatura se ha disparado.... Como ejemplo de que las cuentas no dan expone su caso: «La empresa te paga por criar los pollos, en mi caso por cada 1.000 pollos te da 96 euros; por cada 1.000 kilos de peso en vivo, otros 40 y luego por cada tonelada de pienso que ahorres en función de unas tablas que establece la empresa, otros 190 euros. En dos meses hemos gastado 27.400 euros, pero solo hemos recibido no llegó a 21.000. Estamos muy por debajo de ser rentables».

Por eso, el pasado 7 de marzo presentaron una carta al Ministerio de Agricultura en la que ya advertían de lo dramático del asunto, alertando además del desabastecimiento de carne de pollo. Entonces repaldaban el documento 200 granjas. Ahora, según este avicultor, ya son 626 explotaciones de toda España las que están avalando el documento en el que piden una solución urgente al problema. 

Para los productores es complicado aguantar en este contexto inflacionista, pero también lo es para la industria integradora. Fuentes de este sector explican que «el incremento de los precios de las materias primas no es nuevo. De hecho, en último trimestre del 2020 empiezan a subir de forma continuada el precio de los cereales, según datos de la lonja de Chicago que marca los precios internacionales y tienen incidencia global; y más de forma exponencial cuando se le suman los costes de suministro. Ahora con la Guerra de Rusia en contra de Ucrania se ha acentuado aún más». Por esa razón detallan que  actualmente a las empresas integradoras del sector avícola se les han incrementado «los costes de producción un 40% desde enero del 2021. No obstante, el incremento de precio al público consumidor solo ha sido del 15%».

Por eso, a su juicio, creen que es importante que cada parte que conforma la cadena alimentaria, desde la producción hasta la distribución, «actúe con la responsabilidad suficiente para no generar un estrés que ahogue al productor y a la industria».

Algo semejante es lo que opinan desde la Asociación Interprofesional Española de Carne Avícola (Avianza): «La situación es insostenible y la realidad y las cifras son alarmantes para todos los que forman parte de la cadena de producción». En este sentido explica que se ha pasado «de un precio de 36.2 euros por megavatio a 289.62 euros por megavatio, según datos del Operador del Mercado Ibérico de la Electricidad (OMIE). Si a esto le sumamos que el precio de los cereales ha aumentado pasando el pienso de tener un coste medio de 300 euros por tonelada durante los últimos 5 años a estar en más de 500 euros por tonelada en el 2022 y que del coste de producción por kilo de pollo, un 70% va para el pienso, hay que pensar que estos costes lo han estado asumiendo las empresas de integración con toda responsabilidad para seguir llevando la carne de ave a la población». Y recuerdan: «Las integradoras llevan un incremento de costes de un 40% de costes desde enero de 2022 y solo se les ha repercutido un 15,5 %».

Desde este colectivo detallan que «el sector avícola lo componen infinidad de actores más como la investigación genética, la crianza en granja, la producción o procesado, la comercialización, la mano de obra, el sector del plástico y cartonaje, la logística.... Y todas estas ramificaciones están en estado crítico». Por esto, urgen a que se cumpla la Ley de la Cadena, «pero en tiempo real y de una forma justa y para que esto sea así necesitamos responsabilidad por parte de la distribución para realizar una retribución acorde al incremento de estas materias primas». Por lo tanto, añaden además, «la distribución o el detallista deberá tener en cuenta este factor en la rotación de sus productos para no incumplir con la Ley de la Cadena».