Animales y criadores de distintas razas gallegas están presentes en Expolugo
03 oct 2021 . Actualizado a las 11:32 h.El San Froilán es feria además de fiesta. Aunque el pulpo, las barracas y los conciertos hayan acabado por adueñarse de la fachada de las fiestas de Lugo, en el interior hay un perfil de agricultura y de ganadería que aún resiste. A pesar de que la pandemia todavía impone algunas restricciones, en el Pazo de Feiras vuelve a celebrarse Expolugo, con animales y criadores de razas autóctonas como rasgo destacado.
La vaca rubia gallega, el porco celta, la galiña de Mos o el caballo de raza gallega son algunos ejemplos de esa variedad que se expone. Además se celebran de nuevo concursos de caballos, cuyo poder de convocatoria, viendo la gente que acudió este sábado por la tarde, parece uno de los importantes reclamos de Expolugo.
Entre los criadores y personas relacionadas con las razas expuestas se escuchaban voces algo variadas, si bien todas coincidían en que estas iniciativas son necesarias y en que tanto los ganaderos como el público esperan que la vida cotidiana vaya pareciéndose cada vez más a la de antes.
José Antonio Ferreiro, ganadero de O Corgo, se mostraba satisfecho de la primera jornada. «Sempre vén xente preguntar. A verdade é que ben», decía, a modo de resumen, dentro de la zona reservada a la Asociación de criadores de rubia galega (Acruga).
Mientras las gradas mostraban buena entrada con motivo de la celebración del concurso equino, el veterinario Luis Guillín atendía el expositor de Pura Raza Galega (Puraga). «A xente ten gana de facer cousas», decía, lo que en su caso supone interés por ver caballos autóctonos y por interesarse por sus características. Por su expositor, comentaba, iba pasando gente a lo largo de la jornada.
El vilalbés Francisco Monasterio, criador de galiña de Mos, también admitía que las ganas de feria siguen estando presentes, aunque subrayaba que la actividad de citas como esta de Lugo estaban disminuyendo en los últimos años.
La variedad estaba asegurada, puesto que en pocas decenas de metros se podía pasar del expositor de la asociación del porco celta (Asoporcel) al del Hospital Universitario Rof Codina. La feria continúa este domingo.