Patrocinado porPatrocinado por

Agricultura avala el estudio que reconoce que los ganaderos gallegos venden la leche por debajo de lo que les cuesta producirla

x.r. alvite

GANADERÍA

PALACIOS

El Ministerio ha dado por buenas las cifras del estudio sobre la cadena de valor de la leche líquida, un documento que cifra en 35 céntimos por litro ese coste

03 jul 2021 . Actualizado a las 16:13 h.

Los ganaderos gallegos se ven obligados a vender la leche de sus vacas por debajo del precio que les cuesta producirla. Lo confirmó ayer el Observatorio de la Cadena Alimentaria del Ministerio de Agricultura que dio por buenas las cifras del estudio sobre la cadena de valor de la leche líquida, un documento que cifra en 35 céntimos el coste medio de producción de un litro de leche. 

Esto supone, 2,3 céntimos más de los 32,7 céntimos que reciben las granjas por la materia prima que entreguen a la industria para su transformación o, lo que viene siendo lo mismo, una pérdida de ingresos que ronda los diez millones de euros, tal y como denuncia el Sindicato Labrego Galego (SLG). «As granxas galegas son as que máis perden do Estado, ao ser as que máis leite producen e as que o fan co prezo máis baixo. Por exemplo, no 2020 as granxas galegas produciron 2.895.849 toneladas de leite que venderon a un prezo medio de 0,323 euros por litro. A partir destes datos, podemos tirar que o sector lácteo galego deixou de ingresar 9.701.096 euros no 2020 por non chegar o prezo a eses 35,65 céntimos no que se sitúan os custes de produción». 

Desde esta organización profesional agraria se critica que este dinero vaya a engrosar las cuentas de resultados de la industria láctea y las grandes cadenas de supermercados bajo el amparo «dunha Lei da Cadea Alimentaria que segue permitindo a imposición de prezos artificialmente baixos nos contratos de compravenda grazas ás prácticas de abuso e extorsión que se lle están a consentir á industria».

 Para evitarlo, desde la Coordinadora de Organización de Agricultores y Ganaderos (Coag), se solicita de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) una inspección de oficio de todos los contratos en vigor entre industrias y ganaderos dado que la Ley de Cadena Alimentaria obliga a la firma de contratos con precios por encima de costes. En este sentido, desde COAG insisten en la necesidad de tener en cuenta la espiral alcista de las materias primas básicas para la alimentación animal que sitúan en el 26% durante el último año. 

Precisamente este es el concepto, según el estudio elaborado por todo el sector y refrendado ayer por el Ministerio, más cuantioso al que tienen que hacer frente las granjas. De hecho, seis de cada diez euros que desembolsan las ganaderías gallegas son para pagar el coste del pienso y los forrajes empleados en la alimentación de su rebaño.

 Inmediatamente después se sitúa el gasto en energía que, según diferentes cálculos, se sitúa entre 2,5 y 4 céntimos por cada litro de leche. Una cantidad que amenaza con aumentar de forma importante debido al encarecimiento que, durante los últimos meses, está registrando el coste del gasóleo y de la electricidad.