Regreso a la granja de las vacas locas, 20 años después: «Aquela Parrula era unha vaca moi boa»
El primer golpe de la crisis de encefalopatía espongiforme lo sufrió Carballedo hace 20 años: aún duele
CArballedo / La Voz
La primera vez que aquella vaca parió tuvieron que ir quince hombres a tirar de la cuerda para ayudar a la cría a nacer. «E non a daban sacado, que pesou oitenta quilos, aquela era unha vaca moi boa», recordaba ayer un paisano que esperaba a que dejase de llover junto a la puerta de una casa en la aldea de Enxerto, en el municipio de Carballedo. En esa casa antes había una granja, y en esa granja se criaba hace veinte años aquel ejemplar tan productivo. A aquella vaca le tocó ser la primera de Galicia y de España en enfermar de encefalopatía espongiforme bovina. Era noviembre del año 2000 y acababa de estallar la crisis de las vacas locas, un mal que por momentos pareció capaz de llevarse por delante media industria cárnica. Después resultó no ser para tanto y todo aquello dejó incluso algunas consecuencias positivas para el sector ganadero.