La subasta ia celebrada en Adai se caracterizó por las altas cotizaciones
27 oct 2019 . Actualizado a las 11:30 h.Un ganadero de Castroverde pagó 3.500 euros por una novilla, perteneciente a una explotación de Samos, en la subasta de raza rubia gallega celebrada este sábado en Adai (O Corgo). La puja de reses de raza rubia gallega, organizada por Acruga, se caracterizó por las altas cotizaciones de reses, pues las cuatro novillas preñadas se adjudicaron por un precio medio de 2.650 euros.
Con un tiempo seco y soleado que favoreció el desarrollo de la puja y con un animado ambiente, hasta 28 personas se hicieron con la tarjeta necesaria para poder participar. Los novillos despertaron, en cambio, menos interés, pues solo se vendió uno de los cuatro presentados, que alcanzó una cotización de 2.750 euroa. Los animales presentados procedían de explotaciones de particulares y de una nave de Acruga.