Paralizan la venta de becerros por no tener la edad permitida para salir de la explotación
GANADERÍA
La inspección veterinaria declaró no aptos para comercializar varios animales de recría en el Mercado Nacional de Ganado de Santiago por su «inmadurez». La norma de bienestar en el transporte dice que no se pueden trasladar terneros que no tengan el ombligo completamente cicatrizado.
20 sep 2019 . Actualizado a las 19:05 h.¿Pudo ser un despiste? No se sabe, pero la verdad es que la inspección veterinaria que revisó los terneros de recría que acudieron ayer al Mercado Nacional de Santiago de Compostela descubrió que varios de estos animales no habían cumplido la edad mínima para poder salir de la explotación. De ahí que paralizara su comercialización. El mínimo permitido para poder ser transportados por ley son haber cumplido los diez días de edad, a menos que el desplazamiento sea inferior a los 100 kilómetros. «Sacalos antes _como explica un tratante_ fai que non tomaran o suficiente calostro e moitos poden morrer. Facer iso non lle convén a ninguén porque como morran os becerros por aí adiante, quén vai querer vir mercalos a Galicia».
De ahí que tanto los representantes de las dos asociaciones de tratantes más representativas de Galicia, Astragal y Acega, como informaron desde el mercado de Santiago, hayan llegado al acuerdo de pedir a la Dirección xeral de Gandeiría e Agricultura un mayor control sobre la edad de la recría en las explotaciones de origen. Al mismo tiempo, añade el comunicado remitido desde el mercado ganadero, piden que se adopten medidas para evitar los fraudes que provocan actualmente la divergencia entre la edad documentada y la que realmente tienen los animales.
«Non se poden transportar tenreiros que non teñan o embrigo completamente cicatrizado»
Desde la Consellería de Medio Rural explican que lo ocurrido en Santiago deriva de la norma de bienestar en el transporte. «No caso dos tenreiros e tenreiras, existen dous condicionantes: por un lado, non se poden trasladar tenreiros de menos de 10 días de idade, salvo que a distancia sexa menor a 100 kilómetros; pero sobre todo, non se poden transportar tenreiros que non teñan o embrigo completamente cicatrizado», apuntan.
Al mismo tiempo, explican que los responsables de cumplir esa normativa sobre transporte son los titulares de las granjas y los transportistas. Añaden además que hay «un plan de controis do benestar no transporte e nas feiras que desenvolven os Servizos Veterinarios Oficiais e as Forzas e Corpos de Seguridade do Estado, no que se contempla a comprobación destes aspectos».
Los animales bovinos, como apunta la norma, deben de estar identificados con dos marcas auriculares (crotales) dentro del plazo de los veinte días posteriores a su nacimiento. En cualquier caso han de estar identifciados antes de abandonar la granja.
Sobre el calostro apuntan que los terneros lo toman entre las 24 y 30 horas posteriores al nacimiento porque después su intestino pierde la capacidad de absorver las defensas. Además, añaden, pueden dárseles complementos que lo sustituyen.