Los fondos para prevención de incendios forestales crecerán un 50 % en el 2026

Mario Beramendi Álvarez
MARIO BERAMENDI SANTIAGO / LA VOZ

FORESTAL

La conselleira de Medio Rural, durante su comparecencia en el Parlamento
La conselleira de Medio Rural, durante su comparecencia en el Parlamento XOAN A. SOLER

La conselleira de Medio Rural, María José Gómez, anuncia en la Cámara gallega que la Xunta llevará las campañas de sensibilización a los colegios

05 nov 2025 . Actualizado a las 08:31 h.

Medio Rural reforzará las actuaciones en materia de prevención de incendios forestales el próximo año, cuyos fondos alcanzarán los 75,38 millones de euros, una cuantía superior en un 50 % a la destinada en el 2025, según ha avanzado la conselleira del ramo, María José Gómez, que ha comparecido en la Cámara gallega a petición propia para dar cuenta del Pladiga 2025 y de las nuevas medidas previstas.

La responsable de la política forestal cifró en 118.996 las hectáreas quemadas en lo que va del 2025 e incidió en la línea argumental que expuso ya Alfonso Rueda en la comparecencia de septiembre, tras la devastadora ola de fuegos de agosto, cuando puso el foco en la mano intencionada de los incendiarios. «Galicia non arde soa, a Galicia quéimana», advirtió la conselleira este martes. La conselleira ha dedicado buena parte de su intervención a las nuevas iniciativas, más que al balance del Pladiga, lo que ha desencadenado las críticas de la oposición.

Entre ellas, destacó más apoyo para favorecer el cumplimiento de las obligaciones en las franjas secundarias y así proteger los núcleos de población. Por eso, avanzó Gómez, el próximo año se duplicará la inversión en el marco del convenio de la Consellería de Medio Rural con la Federación Galega de Municipios e Provincias y Seaga, que pasa de los 12 millones de euros actuales a los 25.

La conselleira puso en valor que el nuevo convenio incluirá un incremento de parroquias priorizadas, en las que los vecinos podrán contratar a Seaga para la limpieza de sus fincas, se agilizarán las ejecuciones subsidiarias más urgentes en las zonas de mayor riesgo de incendio, se prestará un mayor apoyo a los ayuntamientos de menos de 10.000 habitantes y se impulsará la creación de barreras naturales en estas franjas con la plantación de frondosas, una cuestión que ya se incluía en el convenio vigente.

María José Gómez anunció también que se seguirá trabajando en otras tareas preventivas en montes públicos dependientes de la Administración autonómica o en aquellas comunidades de montes vecinales con las que se lleven a cabo proyectos de colaboración en esta materia, como son los desbroces de áreas cortafuegos o franjas auxiliares, la mejora de pistas forestales o la adecuación de puntos de agua.

Labor educativa

En el ámbito de la formación, enfocada cada vez más en la especialización del personal, la conselleira avanzó que entre este año y el que viene se destinarán 1,8 millones de euros al entrenamiento del personal, un 19 % más que en el bienio anterior. Al mismo tiempo que se intensifica el plan formativo, María José Gómez explicó que se seguirán reforzando las acciones de sensibilización e información hacia los vecinos, especialmente de los que residen en parroquias de alta actividad incendiaria. Las campañas de la Xunta también llegarán a los más pequeños, con la puesta en marcha de un programa específico en los centros educativos para dar a conocer el trabajo del personal y las instalaciones que conforman el dispositivo y para concienciar a los escolares sobre la importancia de proteger el monte.

Respecto al balance del 2025, la conselleira ha destacado la apuesta por el capital humano para reforzar el operativo: tres mil personas que en época de alto riesgo pueden llegar a las 7.000, en un dispositivo mucho mejor reforzado que en el 2008, recordó la conselleira, cuando había 1.100 trabajadores menos dependientes de la Xunta. María José Gómez detalló que en lo que va de año se registraron en Galicia 1.492 fuegos, que afectaron una superficie de 118.966 hectáreas. Durante ese mes se detectaron 673 fuegos, de los que el 70 % fueron intencionados.

Duras críticas de la oposición

La diputada del PSdeG Carmen Rodríguez Dacosta, en un tono durísimo, ha acusado a la conselleira de falta de autocrítica y de comparecer sin hacer un balance real de la política de prevención y lucha contra el fuego. «Diga concretamente que medidas de prevención fixeron no 2025 e diga que medios había nos distritos», ha retado la socialista, que ha establecido una relación de causalidad entre la política de la Xunta de abandono del medio rural y lo ocurrido el pasado mes de agosto, y que ha calificado de «indignante» la comparecencia. «Pedimos a súa dimisión inmediata», ha solicitado. El PSdeG ha lamentado que se perpetúe un modelo ineficaz al que se añade ahora la moratoria del eucalipto, lo que pone más en riesgo a provincias como Ourense.

La nacionalista Montserrat Valcárcel le ha recordado a la responsable de la Xunta que el problema al que se enfrenta Galicia va más allá del monte. «Estamos a falar de que está en risco a vida dos galegos e das galegas porque os novos lumes chegan ás portadas das casas», ha advertido la diputada del Bloque, quien cree que el problema está y no va a desaparecer «porque os modelos climáticos son claros». Los nacionalistas consideran que hacen falta cambios estructurales, de cohesión y protección del territorio, con diversificación de especies y no con masas continuas de combustible. «Fan falta cambios estruturais porque o cambio climático non pregunta por orzamentos», ha reprochado Valcárcel a la Xunta.

Discrepancias con la moratoria

Los votos del grupo del PPdeG, mayoritario en el Parlamento, impidieron este martes la aprobación de una moción presentada por el BNG para endurecer la moratoria sobre los cultivos de eucalipto. El texto, defendido por la parlamentaria del Bloque Montse Valcárcel y que contaba con el apoyo del PSdeG, instaba a la Xunta a establecer una moratoria «indefinida» y sin excepciones de nuevas plantaciones de esta especie, en vez de la «flexibilización» promovida por a Xunta, que abre la mano el próximo año ante determinados supuestos, como aquellas zonas afectadas por la plaga del pino.