
Investigadores de la Universidad de Viterbo describen en el VII Simposio Internacional da Castaña que se celebra en Lugo la técnica del choque térmico como fórmula que ayuda a combatir el Gnoniopsis smithogilvyi
27 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Fue en el 2020 cuando la Gnoniopsis smithogilvyi, un hongo que causa estragos en los frutos del castaño, fue detectado por primera vez en Galicia. Dice la investigadora de la universidad italiana de Viterbo, Carmen Morales, que estos días participa en el VII Simposio Internacional da Castaña que se celebra en la Escola Politécnica Superior de Enxeñaría (EPSE) del Campus Terra de la USC, que al igual que sucede a los humanos con las bacterias que pueblan sus estómagos, es probable que este hongo sea endófito, es decir, que haya estado todo el tiempo dentro de la planta, «pero el efecto del cambio climático y de la avispilla del castaño haya hecho que se manifieste dañando, sobre todo, los frutos». No cabe duda de que lo hizo. Porque en el 2021 muchos castaños del interior de Ourense y de Lugo apenas pudieron salvar sus frutos, afectados por el hongo.
La pregunta que tratan de responder ahora en Viterbo es cómo ponerle freno. Como explica la investigadora la batalla contra el hongo abarca distintos frentes que, al unirse, dan solución al sector. «Lo que hicimos en un primer momento es atacarlo en campo aplicando un funguicida convencional y también otros ecológicos. El que mejor resultado dio fue el fosfito de potasio con zinc. Una vez recolectadas las castañas, realizamos pruebas tras la recolecta en empresas dedicadas al procesado de la castaña. Ahí pudimos comprobar que aplicando agua a unos 50 grados durante un período de entre 30 y 45 minutos se lograba inactivar el hongo. En fases posteriores otro grupo también pudo comprobar que aplicando ozono en las cámaras frigoríficas donde se conserva el producto también se logra frenar su efecto dañino», explica esta investigadora experta en tratar estas plagas.
Todos los detalles del estudio realizado en esta universidad ubicada en una región italiana con gran tradición en el cultivo de castaña fueron dados a conocer ayer en Lugo. De esta forma la práctica conocida como choque térmico (aplicar agua a alta temperatura durante un tiempo) se abre una esperanza para el sector a la hora de enfrentar una plaga que deriva en un problema económico para el sector industrial dedicado a la transformación de la castaña y también para el sector productor.